La jugadora del Deportivo Alavés femenino, Enma Martín (Roquetas, 13-08-2002) disputa su tercera temporada como albiazul después de que llegase a Vitoria con 15 años, y lo hace con toda la confianza de lograr el ansiado ascenso. La centrocampista afincada en Tortosa (Cataluña) hace balance del buen comienzo de temporada del equipo, y a la vez echa un vistazo tanto al pasado como al presente, y mira al futuro con el objetivo de lograr sus sueños.
Ya ha transcurrido tiempo de la lesión pero ¿cómo se encuentra?
-Estoy muy contenta. Después de estar un año parada por la lesión que tuve, ahora tengo muchas ganas de afrontar lo que viene en el día a día. La verdad que hasta el momento estoy contenta por cómo está transcurriendo todo.
¿Cómo vivió la lesión?
-Mi día a día me ayudó a olvidarme de esa lesión y la gente que me rodeaba, el club incluido, me arropó con mucho cariño. Y por cosas como esa voy a estar eternamente agradecida. También hay que tener en cuenta que aunque estés en contacto con tu familia y hables con ellos, no los tienes aquí y siempre se hace algo más duro. Luego, a causa de la pandemia, continué con mi recuperación en mi hogar, y aunque estás con los tuyos, el no poder estar en unas instalaciones como las de Ibaia siempre complica la cosa. Eso sí, a día de hoy estoy perfecta.
¿Cómo está viviendo la experiencia vitoriana?
Al final yo vengo de jugar en equipos de categorías inferiores y esta es mi primera experiencia en un equipo con nombre. Desde que estoy aquí he aprendido mucho, en especial, en aspectos tácticos, pero en el apartado que más he aprendido y donde el Alavés también me ha ayudado mucho es a nivel personal, ya que esta experiencia me está ayudando a madurar. Me gustaría dejar el fútbol apartado en este sentido porque donde más he mejorado, ha sido como persona. El Alavés me está ayudando a crecer como futbolista y como persona.
Tres años ya en Vitoria. ¿Se considera una 'patatera' más?
-No sé si me considero una más, pero la verdad que tengo un cariño muy grande tanto a la ciudad como a la gente. Si puedo seguir unos añitos más aquí, o quién sabe si toda la vida, me encantaría. Vitoria es una ciudad que desde el minuto uno me gustó muchísimo.
¿Cómo se describiría?
-Constante, inconformista deportivamente hablando y extrovertida.
¿Qué es lo que más le gusta de Vitoria? ¿Y lo que menos?
-Lo que más me gustó cuando llegué fue la gente. No me la imaginaba así, no sabría decirte cómo me la imaginaba, pero no pensaba que fuera tan cercana, que me arropasen tanto desde el momento en el que llegué. Esto me impresionó muchísimo, y no solo las personas del equipo con las que tengo más contacto, sino también por la gente que he ido conociendo por la calle, como con mis compañeros de clase. Lo que menos, difícil, pero creo que el tiempo. El frío que hace ahora en invierno que no tiene nada que ver con Cataluña.
¿Cómo es su día a día en Vitoria?
-Mi día a día me encanta. Estoy estudiando un grado superior de deportes, que al final está relacionado con el fútbol y con lo que a mí personalmente me gusta. Esto me lleva a que esté todo el día relacionada con el deporte y estoy muy feliz.
Pero sí echará de menos la playa, la comida€
-Lógicamente lo que más echo de menos es a la familia, pero sí, reconozco que se echa de menos la playa, la comida, el calor...
¿Vitoria o Tortosa?
-Vitoria. Aquí estoy cumpliendo un sueño que es jugar en un equipo grande y siempre estaré agradecida al club que me ha abierto las puertas.
¿Ve a Vitoria como su ciudad para muchos años?
-Mi objetivo es jugar en Primera División y nunca me he parado a pensar en un equipo en el que yo quiera jugar en un futuro, o si quiero cambiar o irme al extranjero o a cualquier otro lado. Yo ahora mismo estoy trabajando con el Alavés y nuestro objetivo es subir a Primera, y qué mejor que hacerlo con el club con el que llevo tres años y con el que estoy muy agradecida y contenta. Ojalá cumpla mi sueño con el Alavés."El club me arropó muchísimo cuando me lesioné y estaré eternamente agradecida"
"Me encantaría seguir unos añitos más aquí, o toda la vida"
"Si mantenemos esta regularidad y seguimos trabajando como lo estamos haciendo subiremos a Primera División seguro"
Le llaman 'pollito' ¿De dónde viene el apodo?
-El primer año que llegué aquí prácticamente todas las jugadoras éramos nuevas, excepto cuatro o cinco que habían estado la primera temporada. Como cuando llegué era la más pequeñita (llegó con 15 años) una compañera del equipo empezó a llamarme pollito. Primero cuando estábamos en casa, luego se fue expandiendo a Ibaia y al final ya al terreno de juego y al final me han cambiado el nombre. Es más, hasta lo tengo tatuado en el brazo porque con este nombre quiero marcar el primer año que salí de casa que será el que me guíe a llegar a cumplir mis objetivos.
¿Cómo se produjo su fichaje?
-Fue una oportunidad que nunca antes había tenido. Cuando llegó el momento estuvimos mis padres y yo barajando las ofertas que había sobre la mesa, pero lo que nos ofrecía el Alavés era muy bueno y yo tenía claro que si yo quería llegar a mi objetivo, que es llegar a jugar en Primera, lo mejor era un club que me abriera las puertas para ello. Y a pesar de dejar la vida que tenía desde el primer minuto he estado muy cómoda en Vitoria tanto a nivel personal como deportivo. A mi madre le costó un poquito más.
¿Alguna manía antes de jugar?
-La verdad es que no. Es cierto que muchos jugadores suelen tener ciertas manías, como salir siempre al terreno de juego con la misma pierna. Pero en mi caso, no. Aunque sí que es cierto que cuando soy titular me gusta salir siempre la última al campo, pero solo si se puede, tampoco me obsesiono.
¿Hobby fuera del deporte?
-Tengo poco tiempo para disfrutar de otras cosas, pero no tengo ningún hobby claro. Me gusta mucho quedar con los compañeros de clase o con las jugadoras del equipo que, aunque nos veamos todos los días, intentas hacer piña y desconectar del deporte. En definitiva, poder estar y charlar con los amigos."Vitoria y el Alavés me han ayudado a crecer como persona y como futbolista""Me empezaron a llamar 'pollito' y me lo tatué en el brazo. Es un símbolo que marca el primer año que salí de casa y será el que me guíe para cumplir mis objetivos""Ojalá cumpla mi sueño de jugar en Primera División con el Alavés"
Este año al equipo se le ve más regular ¿Qué ha cambiado respecto al año pasado?
-Desde que empezó la pretemporada comenzamos ya muy concentradas y sobre todo muy contentas por poder volver. A nivel futbolístico, los aspectos que nos van enseñando y marcando son muy claros y creo que estamos en una muy buena dinámica y afrontamos cada fin de semana como si fuera una final. Además, sabemos, ya por experiencia, que los equipos son muy fuertes y que tenemos que darlo todo en cada jornada. Al final, todo esto es un trabajo de equipo que si lo hacemos como tal y remamos en la misma dirección, nos ayuda a ser regulares.
Hasta la fecha, una única derrota.
-Sí, además fue un partido de esos en los que dominas durante casi todo el encuentro, que estás en su campo y generando ocasión tras ocasión, pero ves que no entra el balón y luego llegan ellas con un disparo y aciertan. Esto hace que te vayas con mal sabor de boca a casa. Al final, son tres puntos que te has dejado y que son muy importantes y más en esta liga donde cada punto vale oro. Después de las derrotas se habla con los entrenadores, con todo el equipo, analizas lo sucedido y dejas el partido atrás y solo piensas en mejorar esos aspectos en los que has fallado.
¿Sería un fracaso no lograr el ascenso a Primera?
-No sé si lo denominaría fracaso, pero sobre todo las que llevamos desde el principio aquí, sí que tenemos ese sueño de subir al Alavés a Primera División. En caso de no lograrlo, sería otro año que no ha podido ser, pero creo que estamos en una buena dinámica, estamos trabajando bien y estoy segura de que el objetivo lo vamos a alcanzar.
-¿Se le ha pasado por la cabeza la posibilidad de disputar en Mendizorroza el partido cuya victoria les dé el ascenso?
-Lograr el ascenso jugando en Mendizorroza sería lo más, no hay palabras. Y ya no te quiero decir si estuviera lleno de gente que te apoya, que estaría aún mejor. Ojalá esta crisis sanitaria se acabe pronto y podamos disfrutar la fase de ascenso en un Mendizorroza abarrotado y ganarla. Sería un gran sueño, la verdad.
Se le describe como una de las promesas del fútbol nacional. ¿Presión o motivación?
-Es más una motivación. Lo importante es seguir trabajando y aprendiendo e ir pasito a pasito. Yo creo que si las cosas las vas trabajando y vas poco a poco, todo puede llegar. A día de hoy, lo que quiero es trabajar y aprender. Esto no quita para que yo agradezca todo comentario positivo hacia mi persona.
¿Jugar en la selección absoluta es otro objetivo?
-Siempre he pensado que las jugadoras que están jugando ahora mismo, de jóvenes, cuando tenían mi edad, tampoco pensarían que podrían llegar a jugar con la absoluta. Es algo que no tengo entre ceja y ceja, es algo que si llega, ya llegará. Ya me gustaría.
¿Apostaría a que el Alavés sube a Primera División?
-100% a que el Alavés sube. Si mantenemos esta regularidad y seguimos trabajando como lo estamos haciendo subiremos seguro.