- El Deportivo Alavés se encuentra en estos días en plena reestructuración de sus equipos de cantera con la vista puesta en el regreso a los entrenamientos de todos ellos el próximo mes de agosto con vistas a preparar la temporada 2020-21. En el filial, una de las caras nuevas será la de Alan Godoy, que se sumará definitivamente al equipo de Segunda División B tras haber debutado a los dieciséis años en la categoría de bronce. El delantero canario participó en tres partidos en los que consiguió un gol -contra el Haro- y, a pesar de encontrarse todavía en edad juvenil, la dirección deportiva ha decidido que compita ya de manera permanente en Segunda B. El delantero canario es una de las mayores perlas de Ibaia y con este ascenso se pretende que entre de lleno ya en una dinámica de futbolista totalmente profesional.
A la pretemporada del filial albiazul se sumará también otro juvenil, el delantero Unai Ropero (Vitoria, 2001), que tratará de hacerse un hueco definitivo en la plantilla en el transcurso de la pretemporada. Para reforzar la defensa, el segundo equipo alavesista ha incorporado también a Toni Frau, de 21 años y procedente del Arenas de Getxo, así como al marroquí Abdelkabir Abqar, también de 21 años y que llega libre desde el Málaga.
En el siguiente escalón competitivo dentro de la estructura del fútbol base alavesista también se han producido movimientos importantes en las últimas horas. No en vano, hasta siete futbolistas nacidos en el año 2001 y que proceden de los equipos juveniles del club dará el salto a Tercera División de la mano del convenido San Ignacio, que tras el ascenso del filial a Segunda B se ha convertido en el punto intermedio entre el fútbol propiamente formativo y esa categoría completamente profesionalizada que en la división de bronce.
Así las cosas, Jon Larrauri, Pablo García, Alejandro Balboa, Mario Fernández, Manu Fernández, Jordan Lamela y George Gagua cambiaran de colores, aunque seguirán ejercitándose y jugando en Ibaia con el San Ignacio. Un salto en su formación al entrar de lleno con mucha juventud en un fútbol ya extremadamente competitivo como es la Tercera División en el caso del grupo vasco.