Vitoria - Huye José Bordalás de las etiquetas que sitúan al Deportivo Alavés como favorito a lo máximo. Lleva repitiendo toda la temporada lo mismo. “Todavía no hemos conseguido nada. Solo hay seis puntos de diferencia con el séptimo. Estamos en buena dinámica, pero esto es una carrera de fondo. Yo solo creo en el trabajo, en la humildad y en tener los pies en el suelo. Si pierdes eso, viene cualquiera, te pega un golpe, te tumba y se te queda cara de tonto”, zanjó.

Y es que dentro del vestuario alavesista no existe la clasificación. Tampoco la diferencia de puntos entre el cuadro vitoriano y el Llagostera. El nombre del rival es lo de menos, ya que este Glorioso sabe que si baja mínimamente su nivel ganar se le pone muy cuesta arriba.

“Venimos hablando durante toda la semana del peligro del Llagostera. Es el partido más difícil porque es un equipo con mucha necesidad. La pasada temporada, este equipo se fue último al descanso navideño y acabó casi en play off. Eso es la Segunda División. Le tenemos el máximo respeto. Se han reforzado bien y muchos fichajes van a participar. Jugadores como Natalio y Fofo vienen de tener minutos con sus equipos y han hecho cosas importantes. Va a ser un partido complicado. Son un equipo muy ordenado, que va a esperar y tratar de salir rápido a la contra y aprovechar las acciones a balón parado. Tienen tres muy buenos lanzadores, como Ríos, Pitu y Emilio Sánchez y gente que va muy bien de cabeza. Hay que tener paciencia y no querer ganar el partido en los primeros minutos”, aseguró.

Por último, Bordalás dio su propia visión de la preparación física de los equipos, dejando claro que, a su juicio, un equipo está capacitado para mantener un nivel muy elevado a lo largo de todo el curso. “Las pretemporadas se planifican para que el jugador esté bien durante todo el campeonato. Yo recuerdo cuando jugaba a algún entrenador que decía que íbamos a estar bien en diciembre y luego llegaba diciembre y estabas en descenso y habían echado al entrenador. Hay que estar bien todo el año y eso es lo que exigimos. Hoy en día, con el trabajo que se hace, los controles que tenemos y la profesionalidad de los jugadores para cuidarse, el nivel físico es muy parejo, aunque puedes tener momentos de más o menos frescura”. - DNA