vitoria - Los aficionados del Deportivo Alavés no guardarán un buen recuerdo del arranque del recién estrenado 2015. Como si la habitual resaca que suele acompañar al día de Año Nuevo se hubiese prolongado unas cuantas jornadas más, el equipo compareció completamente desubicado y fruto de ello fue el tremendo repaso que recibió de manos del Mirandés en el tramo inicial de la contienda escenificada en Mendizorroza. Una circunstancia que, concluidos ya los noventa minutos de juego, Alberto López no acertaba todavía a explicar.

El entrenador albiazul -que no dudó en reconocer que se trataba probablemente de la ocasión en la que más “cabreado” se encontraba desde que arrancó la temporada-, incidió una y otra vez en la nula competitividad del grupo hasta el ecuador del primer periodo, lo que facilitó enormemente el trabajo de su adversario. “Nos ha costado mucho adaptarnos al estado del campo y no entiendo el motivo. Habíamos entrenado aquí ayer -por el viernes- para ver cómo estaba y sabíamos perfectamente lo que nos íbamos a encontrar pero luego, a la hora de la verdad, parecíamos nosotros el equipo visitante y no el local. Desde luego no esperábamos una derrota así”, argumentó.

Aun asumiendo por completo que el pésimo arranque -“me ha sorprendido muy negativamente y no le encuentro explicación”, reiteró- fue la principal causa del enésimo tropiezo alavesista en Mendizorroza, el técnico también cargó las tintas en otros aspectos. “En las segundas fases de los dos tiempos hemos reaccionado y estado mejor. Especialmente después del descanso hemos tenido seis ocasiones muy claras como mínimo y dos goles anulados que para mí eran claramente legales. Y esas son acciones muy determinantes a la hora de enjuiciar cualquier encuentro”, significó.

Otro asunto en el que incidió Alberto y que reconoció que es uno de los que más le preocupan en estos momentos es el hecho de que, una vez más, el rival de turno logró perforar la portería de Manu Fernández sin apenas obstáculos y se fue con tres tantos en su casillero. “Nos están marcando con mucha facilidad. Llevamos ya cuatro o cinco jornadas así y es una tendencia que tiene mucho peligro. Antes teníamos bastante seguridad atrás pero la estamos perdiendo y en una categoría como esta sabemos que es algo fundamental recibir pocos goles”, advirtió. Si a esta excesiva porosidad, se le añade la escasa efectividad que arrastra El Glorioso desde el inicio del curso, el resultado no puede ser más previsible y se parece bastante a lo sucedido ayer contra el Mirandés. “No hemos estado contundentes en ninguna de las dos áreas”, ratificó Alberto.

Por último, el guipuzcoano puso el dedo en la llaga en uno de los principales lastres del equipo albiazul, su pésimo balance como local (sólo ha ganado en una de sus cinco últimas comparecencias). “Nos está costando demasiado. Queremos sumar victorias aquí porque es nuestra casa y porque es donde nos tenemos que intentar hacer fuertes para acercarnos a nuestros objetivos”, recordó Alberto López.