Vitoria. Experiencia para la portería y la defensa; poderío físico para el centro del campo; creatividad en las bandas y en la mediapunta; y fortaleza en la punta del ataque. El Deportivo Alavés ha marcado unas pautas claras para cada una de las demarcaciones y ha doblado posiciones hasta conformar una plantilla de veintitrés fichas profesionales que tendrá que ser la que lleve el peso del equipo por lo menos hasta que el mercado se abra de nuevo en enero de 2014. A la base del pasado curso, con nueve futbolistas renovados, se han unido jóvenes con proyección que quieren dar un paso adelante en Vitoria y también veteranos que han estado en la élite y que buscan relanzar su carrera en la capital alavesa después de no haber disfrutado mucho en los últimos años por unas u otras razones hasta completar un total de catorce incorporaciones en un mercado que ha sido muy intenso para la dirección deportiva encabezada por Javier Zubillaga, al que trabajo no le ha faltado este verano. Serán el tiempo y el trabajo los que determinen si los mimbres elegidos son suficientes para componer un cesto resistente o si se ha errado en la confección de un nuevo proyecto que, como casi todos, cuenta de inicio con algunas incógnitas, pero al mismo tiempo con la certidumbre de que varios jugadores son de una solvencia demostrada de años.

En este segundo apartado se puede poner, por ejemplo, al que fue el primer fichaje alavesista para la presente campaña. Iñaki Goitia llegó a Vitoria con el aval de ser uno de los guardametas más reconocidos de la categoría de plata, donde acumula con los tres ya disputados esta temporada 225 compromisos. A su vera estará un Iván Crespo que es puntero en la categoría de bronce y que busca hacerse un hueco en la de plata. En esa misma línea de experiencia se mueve un central llamado a liderar la zaga como Pepe Mora, que ya lleva 231 partidos en la categoría y que ha comenzado a demostrar su solvencia. Aunque, eso sí, para batallitas nadie mejor en el equipo que Jarosik, quien está a punto de cumplir los 36 años y llega al Alavés después de una trayectoria profesional brillante y está llamado a ser uno de los referentes de este nuevo proyecto.

Con Mora y Jarosik, el eje de la zaga se completa con un Luciano al que tampoco le faltan años de carrera y el cuarteto lo cierra Alex Ortiz, quizá el perfil diferente desde el punto de vista físico. Si los tres anteriores son tremendamente fuertes y poderosos, el sevillano es más técnico y veloz, aunque en dotación con el balón en los pies el central checo es una baza segura.

En la banda derecha, la continuidad de Rubio se ha visto complementada con la llegada de un joven de mucha proyección como Medina. Por su parte, en la izquierda se pretende recuperar al Nano de sus mejores años en Segunda, mientras que Manu García es otro jugador que busca un nuevo salto en su carrera. En todo caso, los cuatro son laterales de muy largo recorrido, por lo que sus carreras por las bandas para sumarse al ataque volverán a ser una constante.

En la zona de mediocentros, la apuesta es por el físico. Ya la pasada temporada funcionó a la perfección la pareja conformada por Jaume y Beobide y este dúo ha encontrado continuidad en una categoría que exige un punto más. Para eso han llegado al club Lázaro y Schenone, centrocampistas de mucho recorrido y buenas piernas que tienen que aportar trabajo defensivo pero también una buena salida con el balón jugado. Se trata de una posición, ese doble pivote, fundamental para Natxo González y por eso hay cuatro jugadores para soportar la carga de toda la temporada, ya que el que juegue ahí estará exigido a un derroche enorme.

zona de calidad El hombre diferente en esa zona es un viejo conocido por Mendizorroza, Emilio Sánchez. Creativo, buen pasador y dominador del balón, lo difícil en su caso es hacerle encajar en un puesto determinado. Por su estilo no es el hombre ideal para jugar justo por delante de la defensa, pero su innegable calidad hace que sea difícil dejarle fuera del once. En este sentido, el técnico vitoriano ya ha demostrado que es capaz de encontrar diferentes alternativas dependiendo de lo que busque en los partidos.

El albaceteño es la transición de la plantilla del físico al talento. Y es que en la línea de mediapuntas y extremos ha vuelto el cuadro alavesista a apostar por futbolistas de enorme calidad, en la misma línea del último curso. Ahí siguen Guzmán y Viguera y se han incorporado Serrano, Juanma y Toti. En el caso de los dos primeros, llegan a Vitoria tras grandes carreras en Primera, pero después de unos últimos años de trayectoria descendente por culpa de las lesiones que ahora quieren revertir. Toti también quiere quitarse de encima ese mal con unas lesiones que le han impedido triunfar desde que saliera del Salamanca con rumbo a Granada. El extremo zurdo charro es el único jugador cedido con el que cuenta la actual plantilla.

Y para la punta de ataque se ha apostado por la fuerza con jugadores de mucha presencia física. Quiroga es quien está llamado a ser la referencia con Vélez secundándole, pero también un joven como Laborda buscará sus opciones en una demarcación en la que además de goles Natxo González exige mucho trabajo y desgaste.