vitoria. Hubo un tiempo en el que el entrenador del Alavés era Javier Pereira y el secretario técnico José María Cidoncha. Era la temporada 2009-2010, y el que por aquel entonces era presidente albiazul, Fernando Ortiz de Zárate, creyó haber encontrado en esta pareja a sus particulares Pep Guardiola y Txiki Begiristain. La idea no funcionó, e Iñaki Ocenda tuvo que hacerse cargo del conjunto vitoriano tras la destitución de Pereira y el posterior despido de Cidoncha, que ahora es entrenador del equipo infantil de la Peña Deportiva Jiennense. Por su parte, Javier Pereira encontró acomodo hace un par de años en el Levante de la mano de Juan Ignacio Martínez, con el que ha conocido la Primera División y este curso la Europa League. Como buen técnico ayudante, el extremeño mantenía un lógico lugar secundario en el engranaje del cuadro levantino, pero el pasado fin de semana quiso acaparar la atención de todos durante el encuentro que enfrentó al Levante contra el Getafe. Y no fue por algo positivo.

El partido, dominado por un Levante que no tuvo suerte de cara al gol y aderezado con varias jugadas polémicas, estaba a punto de tocar a su fin cuando el entrenador nacido en Badajoz, que en Mendizorroza no era conocido especialmente por su efusividad en la banda, saltó de su asiento para decir algo al banquillo del Getafe. Según aseguró el técnico del cuadro madrileño en sala de prensa, Pereira se acercó a ellos para gritarles "¡qué culo tenéis!", no en referencia a la apolínea figura de los jugadores del Getafe sino por la, en su opinión, excesiva suerte de los azulones en el duelo disputado en el Ciudad de Valencia. A Luis García, exentrenador del Levante, le faltó tiempo para lanzarse a por el segundo de Juan Ignacio Martínez. "No permito a nadie que me diga nada así de mi equipo. Al igual que me encaré con Mourinho cuando estaba en el Levante, ahora lo hago también. No me puede decir en la cara que hemos tenido culo", explicó García.

El conato de pelea entre ambos no quedó sólo en la curiosa e innecesaria frase que salió de boca de Javier Pereira porque, según aseguraron ayer varios medios presentes en el estadio valenciano, el exalbiazul y Luis García continuaron lanzándose algún que otro improperio de camino a los vestuarios tras el pitido final de Undiano Mallenco. Por si fuera poco, el segundo técnico del Levante también tuvo problemas con el médico del Getafe, Christopher Oyola, que según las mismas fuentes también fue en busca de Pereira visiblemente enfadado por su actitud, y tuvo que ser el preparador de porteros del equipo local el que calmara al doctor y evitara que éste llegara a las manos con Javier Pereira, cuyo jefe, Juan Ignacio Martínez, optó por no entrar a valorar lo sucedido. "Han tenido unas cosas, no sé lo que ha pasado. Las cosas del campo se quedan ahí y ya está", zanjó en busca de la sensatez que, al parecer, le faltó al antiguo entrenador del Alavés.