vitoria. Al igual que ha sucedido durante prácticamente todas las semanas desde que arrancó la competición, los días previos al derbi con el Eibar vienen marcados por los problemas que afectan a buena parte de la plantilla del Deportivo Alavés. Y es que, una vez más, Natxo González debe mantener a un número de sus jugadores entre algodones para tratar de que no aumente el número de bajas con que cuenta para afrontar este trascendente partido.
La que ya es segura es la de Manu García, que ayer fue castigado con un encuentro de suspensión por el Juez de Competición como consecuencia de su expulsión el pasado fin de semana en Noja. Junto a él, hasta cinco hombres que arrastran molestias podrían integrar esta lista de ausencias. Javi Hernández y Beobide son los casos más preocupantes debido a la rotura de fibras del primero y el esguince del segundo. Además, Agustín (con sobrecarga en los adductores), Jonan y Luismi (ambos en principio con problemas leves) tampoco se entrenaron ayer con el grupo.