barcelona. El entrenador del FC Barcelona, Tito Vilanova, cumplió ayer cien días como primer entrenador del club blaugrana, desde su debut en partido oficial el 19 de agosto, y lo ha hecho con el sello del mejor arranque liguero de la entidad, el pase a octavos en la Champions y la única mancha de la derrota en la Supercopa contra el Real Madrid.
Vilanova, quien en la rueda de prensa de su presentación como primer entrenador aseguró que perdería en cualquier comparación con su antecesor Pep Guardiola, de momento ha firmado el mejor arranque liguero con doce victorias y un empate, en el clásico, en las primeras trece jornadas disputadas.
En total, tras el 5-1 conseguido ante la Real Sociedad en la jornada inaugural de Liga, los blaugranas han jugado a las órdenes de Vilanova 21 partidos oficiales, con 18 triunfos -12 en Liga, 4 en Champions y 1 en Supercopa-, lo que supone un 85,7% de éxito. Así, el Barça de Vilanova no es sólo el mejor de la historia del club en cuanto a inicios de campeonato doméstico sino que ha igualado el mejor arranque de un equipo en la historia de la Liga. Si el equipo catalán es capaz de ganar el próximo sábado al Athletic, el Barça habrá batido el récord que ahora comparte con el Real Madrid de Radomir Antic.
Víctor Valdés es el jugador más utilizado en este centenar de días, ya que sólo se ha perdido el estreno en la Copa del Rey ante el Alavés y suma 1.800 minutos, por delante de los 1.746 de Leo Messi y los 1.601 de Xavi Hernández.
Once canteranos, once puntos de diferencia sobre los blancos, 19 goles de Messi en trece partidos, todo son buenas noticias en el Camp Nou. El sueño lo verbalizó Louis van Gaal, lo planificó Josep Guardiola y lo ha concretado Tito Vilanova. Este ha sido el camino que ha llevado al Barcelona a jugar por primera vez con once futbolistas criados en La Masía, una apuesta que se concretó con una goleada ante el Levante (0-4). El entrenador azulgrana ya había comentado que era muy posible que esta temporada el equipo jugara con once canteranos, más por la inercia de la situación que por un cupo de números.
Utiliza a los canteranos para mantener un estilo de juego, que ha ido evolucionando. Cuando al equipo barcelonista se le solicitaba un plan B para tener opciones ante las estrategias conservadoras de los rivales, Vilanova ha decidido apostar por sus jugadores más creativos para tener más opciones.
Tito Vilanova, en el partido en el Reyno. Foto: javier bergasa