Vitoria. Natxo González ha sido el gran protagonista de la semana alavesista por razones muy distintas a las que le hubieran gustado, pero el preparador vitoriano ya se encuentra completamente restablecido de los dos mareos sufridos en los últimos días y ayer quiso dejar claro que estos problemas no le van a afectar de cara al futuro. "Estoy bien. Ha sido una semana un poco rarita desde el domingo, pero bueno. Todo está correcto y ya estoy con ganas de volver al campo, que es lo que más me gusta. Después de todas las pruebas que me han hecho, todo está perfecto, así que encantado. Es un simple mareo que puede venir de muchas cosas, pero descartando algo importante. Esto le puede pasar a cualquiera mañana. Un mareo te puede venir por cualquier circunstancia. No lo asociaría con la profesión en sí. Son cosas que se van dando con la edad, que se va notando. Puede ser por estrés o tensión, pero cada uno en su vida y su trabajo puede estar mejor o peor", señaló el preparador alavesista, que quiso agradecer todas las muestras de afecto recibidas a lo largo de esta semana: "En estos momentos, que no han sido ni muchos menos delicados, se agradece mucho ese cariño".
Archivado ya este episodio, el técnico vitoriano se centra ahora en el duelo de esta tarde contra el Eibar, un enfrentamiento entre dos equipos llamados a pelear por el liderato del grupo. "El Eibar es un equipo de los fuertes porque año tras año está en el grupo de cabeza disputando fases de ascenso y esta temporada seguro que también va a estar peleando por los puestos de privilegio. Es un partido más, pero importante porque es ante un rival que va a estar arriba", indicó.
Natxo González considera que el Eibar cuenta "con ciertas ventajas por su estilo cuando juega como local", pero advierte de que su equipo va especialmente motivado a un campo como Ipurua "que es histórico y te da un añadido más para afrontar el partido con la máxima ilusión". Todo ello dentro de un duelo en el que el preparador vitoriano espera que su equipo sepa adaptarse a las circunstancias: "Tenemos que ser un equipo capaz de adaptarse a diferentes situaciones. Es un partido en un campo complicado, ante un rival complicado, con puntos fuertes y débiles y en función de eso, sin renunciar a nuestra personalidad, habrá que meter alguna variante para contrarrestarles. Según pasen las jornadas tendremos que tener variantes para adaptarnos a los condicionantes que se den".
Último entrenamiento A pesar de jugar esta tarde en un horario bastante tempranero, la plantilla alavesista llevará a cabo por la mañana (10.00 horas) una última sesión de entrenamiento que les servirá a los jugadores para poner la musculatura a tono y para trabajar los últimos aspectos tácticos y de estrategia. En dicha sesión Natxo González sabrá si definitivamente puede contar con Asier Salcedo o si el vitoriano no puede ser de la partida por las molestias que arrastra en una de sus rodillas.