Vitoria. Desde el punto de vista institucional, todo son buenas noticias para el Deportivo Alavés a lo largo de los últimos días. Si el lunes las Juntas Generales de Álava aprobaron de manera definitiva el nuevo pacto global con la entidad del Paseo de Cervantes, hoy será el Ayuntamiento de Vitoria el que se sume a la hoja de ruta que propició el desembarco del grupo inversor liderado por Josean Querejeta. La última pata del banco que en este sentido aún cojea es la del Gobierno Vasco, el único Ejecutivo con el que el club albiazul no ha alcanzado aún un acuerdo para plasmar en la realidad el pacto entre partidos políticos al que se llegó antes de la llegada del nuevo equipo gestor a las oficinas del Paseo de Cervantes el pasado 24 de junio.
El Alavés, a través de su presidente Avelino Fernández de Quincoces, y el Ayuntamiento, a través del alcalde Javier Maroto, rubricarán hoy sobre el papel el pacto urdido por Partido Nacionalista Vasco y Partido Socialista de Euskadi al que en última instancia se acabó sumando el Partido Popular, actual mandatario en las dos principales instituciones alavesas.
En lo tocante al Consistorio, el acuerdo hablaba de un convenio por cinco años -desde 2011 hasta 2015- a cambio de un montante económico de 1.550.000 euros. Esta cantidad se repartiría en cinco anualidades con cantidades crecientes y que se verían incrementadas en el caso de ascenso de categoría.
Así, al año 2011 corresponde la cantidad neta 210.000 euros, cifra que iría aumentando con el transcurso del los años y que debería verse actualizada en relación al IPC. Al año 2012 corresponderían 260.000 euros; 310.000 euros en el 2013; 360.000 durante 2014 para, finalmente, alcanzar los 360.000 en 2015, último año en el que estará en vigor el convenio que hoy van a suscribir el Ayuntamiento y el Alavés.
Pero, además de esta partida de 1,55 millones de euros, el Ayuntamiento también saldará antes de finalizar el presente año la deuda que arrastra con el club tras el acuerdo alcanzado para evitar un contencioso por la reforma de las instalaciones de Betoño durante su cesión por parte del Consistorio al club albiazul.
Poco antes de finalizar el año 2010, el por entonces alcalde Patxi Lazcoz desembolsó la primera de las dos partidas de 200.000 euros como compensación a las obras que el club realizó para la mejora de dichas instalaciones municipales. A pesar de que el anterior regidor se comprometió con el por entonces presidente alavesista, Alfredo Ruiz de Gauna, a desembolsar los 200.000 euros restantes a la mayor brevedad posible, lo cierto es que el cambio de gobierno llegó sin que se hubiese producido ese pago.
Dentro del pacto para la llegada del nuevo grupo inversor se recogía esa cantidad pendiente y el Gobierno encabezado por Javier Maroto desembolsará ahora esa partida de 200.000 euros, lo que unido a los 210.000 correspondientes al primer año del convenio revertirán en 310.000 euros en efectivo en las arcas de un club necesitado de recursos económicos.
Con la rúbrica definitiva de los pactos con las instituciones -la publicidad de las mismas ya luce desde hace un par de semanas en las equipaciones oficiales del primer equipo-, el Alavés consigue liquidez para afrontar sus obligaciones monetarias, cuestiones que hasta la fecha han sido sustentadas por los 2,5 millones de euros aportados por el grupo inversor en la última ampliación de capital, a los que hay que añadir el crédito de dos millones de euros solicitado por el club para solventar sus problemas de tesorería.
Esta esperada inyección económica sirve para ir haciendo frente a los pagos pendientes. En este sentido, los dirigentes albiazules están trabajando especialmente en la búsqueda de acuerdos con los acreedores para solventar cuanto antes las deudas arrastradas desde el concurso a cambio de que el importe de las mismas se vea reducido.