Miranda de Ebro. Resta y sigue. No encuentra medicina ni antídoto el Deportivo Alavés para cortar la hemorragia que le está desangrando. Un mes malo está echando por tierra todo el gran trabajo desarrollado a lo largo de una temporada en la que los nubarrones han alcanzado ya al Glorioso para descargar sobre él una furibunda tormenta que ha propiciado la apertura de vías de agua por todos sus costados. Paga a precio de petróleo cada error el conjunto vitoriano y, como fallos graves tiene en cada partido, no fue menos en Anduva. Un despropósito colectivo de defensa y guardameta propició la victoria de un Mirandés que celebraba su suerte a la vez que el Alavés rumiaba un nuevo capítulo de la particular tragedia que lleva ya un mes protagonizando sin encontrar la salida a este siniestro círculo vicioso.

Gol: 1-0, minuto 48: Pablo Infante. Mal despeje de Montero que recoge Muneta en el centro del campo y mete un balón en profundidad a Pablo, quien supera con un disparo a media altura la salida de Montero.

Tarjetas: Adrián Lixandru (colegio aragonés). Amonestó a Alaña (minuto 22), Iván Malón (minuto 78), Candelas (minuto 80) y Óscar Rico (minuto 84).