El cuerpo técnico del Real Unión, próximo adversario del Deportivo Alavés, acudió ayer a Mendizorroza para espiar al conjunto albiazul frente a la Real Sociedad. Pese a que disputaron su duelo en La Muela el domingo por la mañana, tanto el entrenador, Álvaro Cervera, como su ayudante, el ex alavesista Iñaki Berruet, emprendieron el viaje de regreso a toda velocidad para poder acudir a las cinco de la tarde al coliseo del Paseo de Cervantes y estudiar a su siguiente rival.