Tras la caída de una gruesa rama de uno de los árboles de la campa de la Encina de Artziniega, desde el Ayuntamiento han procedido a remitir una solicitud al Departamento de Medio Ambiente de la Diputación para que se realice un estudio de la salud del arbolado tanto de este enclave de esparcimiento vecinal como de la centenaria encina del santuario de la patrona local, sito en las inmediaciones, “que no olvidemos es Árbol Singular del País Vasco y está protegido”, han subrayado desde el Consistorio.

No en vano, un informe de la propia Diputación ya en 1997 advertía del “lamentable estado general” del arbolado. Desde entonces se han hecho actuaciones de consolidación de algunos ejemplares, se han plantado otros, pero el Ayuntamiento cree que, para evitar riesgos, la situación de algunos árboles requiere de más actuaciones y un estudio nuevo, ante los daños que viene causando desde hace años el escarabajo cerambyx cerdo o gran capricornio. Una especie estrictamente protegida por las leyes europeas.
Ya en otoño de 2021 se desgajó otra rama, de 2.000 kilos de peso y 80 centímetros de diámetro, de la famosa encina del templo, pero se entregó al escultor local Xabier Santxotena, que la convirtió en la pieza "Espacio para una aparición", sita desde 2022 en la entrada al Ayuntamiento.