Saturadas de trabajo físico y mental. Sin descansar porque "les llaman en sus días libres para cubrir alguna baja de otra compañera". Con solo un fin de semana libre al mes.
Es la precaria situación laboral de muchas trabajadoras de las residencias de Álava.
"Algunas no llegamos ni a los 900 euros de sueldo, mientras hay familias pagando 3.000 y 4.000 euros al mes por la residencia"
Algunas no llegan ni a los 900 euros al mes de sueldo, "mientras hay familias pagando 3.000 y 4.000 euros al mes por la residencia". Son palabras de trabajadoras que han vuelto a salir a las calles de Gasteiz para manifestarse junto a ELA, el pasado martes en la Plaza de la Virgen Blanca.
Muchas de ellas tienen dos y tres trabajos para llegar a fin de mes, y otras denuncian que "acuden a trabajar enfermas" porque no se les complementan las bajas.
En 2019 las trabajadoras de las residencias privadas y viviendas comunitarias de personas mayores del territorio iniciaron esta lucha para tener el primer convenio provincial que les saque de la precariedad.
Casi 40 jornadas de huelga. Cinco años de lucha en Vitoria. 1.200 trabajadoras con sueldos que no llegan al salario mínimo “si no fuera por los pluses de todas las noches y festivos que hacemos”.
Saben que tienen una de las jornadas más altas, pero son jornadas parciales que no dan para vivir.
"En muchas residencias atendemos 24 horas a dependientes de grado 3 que necesitan cuidados absolutos todo el tiempo", recuerdan las propias trabajadoras, a las que les exigen tanto de sus propias empresas como los familiares, soportando situaciones de estrés, cansancio y agotamiento físico y mental.
Recuerdan que son auxiliares en una gran mayoría, con unas funciones muy concretas, que "no son enfermeras, ni peluqueras... como algunas familias les exigen a diario".
Les exigen tanto de sus propias empresas como los familiares, soportando situaciones de estrés, cansancio y agotamiento físico y mental
La mesa negociadora sigue bloqueada para negociar un convenio que afecta a más de un millar de trabajadoras de las residencias privadas de Álava.
Desde ELA consideran positiva la noticia del acuerdo presupuestario alcanzado en la Diputación de Álava por la coalición de gobierno PNV-PSE y EH Bildu, con una dotación económica para lograr ese primer convenio de residencias, "resultado de la lucha de las trabajadoras".
Pero es una plantilla que necesita mejorar sustancialmente las condiciones laborales, "no solo que les mejoren mínimamente el salario y la jornada".
Recuerdan que se ocupan del cuidado y la atención de las personas mayores, 24 horas al día y 365 días al año.
"La Diputación se limita únicamente a hablar de salario y de jornada, cuando se está luchando por un convenio que implique la totalidad de los conceptos laborales", explican fuentes sindicales de ELA, que inciden en que la plantilla "continuará movilizándose en 2025 hasta conseguir un convenio provincial digno para todo el sector".