El diputado general de Álava, Ramiro González, ha defendido la prórroga de doce años que el Consejo de Gobierno foral ha aprobado para ampliar el plazo del pago de 5,4 millones de euros de un préstamo participativo que mantiene el Deportivo Alavés con la Hacienda alavesa desde el año 2011, ya que "es un buen negocio para la Diputación, que ingresa "22 millones más de euros, si el club está en Primera División".
González ha explicado que la decisión obedece a que la situación económica del club "no está suficientemente saneada", a interpelación del grupo juntero de Elkarrekin Araba, en el pleno de control de las Juntas Generales de Álava.
El diputado general ha manifestado que "es habitual" que la Diputación conceda aplazamientos de pagos, cuando una empresa del territorio lo solicita, si "se considera necesario o conveniente para mantener la actividad productiva y el empleo", como se ha decidido en el caso del equipo de fútbol vitoriano.
"Es un buen negocio para la Diputación", ha señalado, para explicar "la diferencia abrumadora" que recibe la Hacienda alavesa, en función de si el equipo está en Primera o Segunda División del fútbol estatal, ya que el Alavés "paga 22 millones de euros más en impuestos" cuando está en la elite del fútbol nacional.
"DIFICULTADES"
"Hoy el Alavés es el club de Primera División con menor límite salarial, menor presupuesto y una situación todavía no suficientemente saneada como para poder tener garantías de competir económicamente y presupuestariamente con otros clubes de la misma división", ha argumentado, para exponer que se trata de "una prorroga a doce años y no a perpetuidad", como ha denunciado Elkarrekin Araba. "Las hipotecas duran el doble de tiempo y las pagamos", ha añadido.
González ha mantenido que el aplazamiento del pago "aporta riqueza material al territorio, a través de puestos de trabajo, ya que el grupo Alavés-Baskonia es uno de los grandes grupos empresariales del Territorio con más de 500 trabajadores", y, por otra parte, "a través de los ingresos tributarios, que son también importantes para la Diputación Foral de Álava".
"Cuando hay una empresa que pasa por dificultades se le concede un aplazamiento del pago, porque se considera que es la manera de garantizar su actividad productiva y el empleo para el futuro", ha declarado, para exponer que la Diputación actúa igual con otras empresas, "como Glavista, a quien no se le están exigiendo las deudas tributarias".
Por otra parte, el diputado general de Álava ha explicado que la decisión se tomó en un Consejo de Gobierno foral extraordinario el pasado 24 de noviembre, ya que "no se podía esperar más, al vencerse el plazo" y por qué "tres tercios de la cámara apoyan" el aplazamiento.
"La decisión cuenta con el apoyo más que mayoritario de la cámara alavesa" (PNV, PSE y PP), por lo que "la mayoría considera que es una aportación buena para el Territorio y el Deportivo Alavés", ha zanjado.
"JEQUE MIMADO"
El juntero de Elkarrekin Araba José Damián García-Moreno ha criticado el aplazamiento de la deuda del Alavés "por otros doce años", ya que "supone aplazar a perpetuidad" el pago. "No se nos ocurre un mayor insulto para los contribuyentes alaveses. Si un ciudadano individual mantuviera una deuda mínima con la Diputación, se le reclamaría", ha censurado.
"No es bueno que una sociedad anónima no pague sus impuestos. Querejeta es el jeque mimado de las instituciones", ha censurado, para recriminar que ya, en 2009, la Diputación se adhirió al concurso de acreedores, "con todos sus créditos y renunciando a los privilegios que le otorgaba la Ley Concursal, para aceptar una quita del 50% de la deuda", que ascendía a 11 millones de euros.
"La deuda restante, de casi cinco millones y medio de euros, debía pagarse en cinco años, entre los ejercicios 2010 y 2014", ha recordado García-Moreno, para quien la resolución tomada por la Diputación es "un trato de favor" al Deportivo Alavés.
