Por increíble que parezca, quién se podía imaginar que un producto, como este tubérculo, que sirvió para alimentar a los más pobres en su día sería la semilla del sueño que comenzó en los años 80 Aladino Amutio cuando se trasladó de su Rioja natal a Vitoria para trabajar en una conocida empresa industrial de la ciudad.
Un trabajo que compaginaba en sus inicios con el suministro de patatas de temporada a mercados centrales ayudándose para ello de proveedores locales. Así es como poco a poco su proyecto inicial fue creciendo hasta tal punto que nuestro protagonista adquirió su primer almacén, empezó a colaborar con productores de la zona y a desarrollar una actividad comercial para contar también con patata procedente de sur del país.
En todo el mundo hay miles de variedades de patatas y desde Grupo Amutio trabajan con medio centenar de las más importantes
Entonces igual no se lo llegaba a imaginar, pero estaba naciendo una empresa familiar que actualmente tiene un volumen de venta anual de más de 70.000 toneladas de patata y que se dedica a la producción y distribución de patata los 365 días del año.
Proveedor de confianza
Para llegar hasta aquí, poco a poco Grupo Amutio se hizo un hueco en el mercado de la patata y dirigió sus miras hacia la localidad murciana de Cartagena a mediados de la década de los 90, como preludio de una colaboración más estrecha con los agricultores de esta región. Tras Murcia, en el año 2004, la empresa (que ya se iba consolidando como proveedor de patata a nivel nacional) logra entrar en una comunidad clave de este cultivo como es el caso de Castilla y León. Un paso que además tenía su simbolismo ya que desde ese mismo momento comenzó con el suministro de este producto los 12 meses del año.
Asentada ya la producción, distribución y comercialización tocaba ir más allá y pensar en el futuro y en lo que estaba por venir. Y como parte de esta inquietud personal y profesional, ejemplificada en el testigo que recogió desde que era bien joven el hijo de Aladino Amutio, Javier, se puso en marcha la construcción de instalaciones con las técnicas más avanzadas para el almacenamiento en frío de la patata, al tiempo que Grupo Amutio se convertía en la primera empresa de todo el país en compartir el riesgo de producción con sus agricultores asociados. Y es que si por algo se ha caracterizado a la familia Amutio desde sus inicios es por el trato y cuidado en su relación con los productores que han confiado en ellos para dar salida a sus cultivos.
Llegados al año 2013 tocaba soñar a lo grande. Tocaba firmar importantes acuerdos con los principales grupos de distribución de la industria alimentaria del país, así como expandirse más allá de las fronteras a Portugal, Francia, Países Bajos, Bélgica, Egipto e Israel. Eso sí, durante este camino internacional uno no se olvida de donde empezó ni de quienes fueron los primeros que confiaron en él. Fruto de ese recuerdo nace el proyecto Amutio En Tu Casa.
Del campo a tu casa
Amutio En Tu Casa es un canal de venta online que nace no con un afán empresarial y de negocio, sino con un guiño emotivo hacia los vitorianos y vitorianas para darles las gracias por haber apoyado en sus inicios lo que empezaba a ser Grupo Amutio.
Así, después de 40 años, los vecinos de Vitoria pueden recibir en su casa con total comodidad el sabor de una patata de calidad, de temporada, una auténtica patata nueva y que se diferencia de la de conservación por el hecho de que se recoge y se consume en su momento de crecimiento. Esto es, no pasa ni por almacenes, ni se conserva ni se somete a tratamientos para mantenerla más tiempo hasta su venta. Va directa del campo a la mesa.
Un valor añadido y diferencial
A lo largo de todos estos años, en Grupo Amutio se han ido ampliando las instalaciones mejorando las divisiones con el fin de acercarse cada día más a las necesidades del mercado.
Grupo Amutio suministra patata los 365 días del año; patata nueva, de calidad y de temporada
Un empeño en el que siguen hoy en día trabajando con más de 50 tipos de patatas distintas (de las miles de variedades que hay en todo el mundo) para dar respuesta de forma rápida y eficaz a las diferentes necesidades de sus clientes. Algo que solo se consigue con confianza y demostrando su buen hacer durante todo el proceso: desde la siembra, pasando por la recolección en el campo, el almacenamiento adecuado y el transporte hasta los puestos de venta tanto en grandes superficies como en el pequeño comercio.
Sin duda, un recorrido donde se mantiene inalterable la esencia del que entonces era el trabajo a tiempo parcial de Aladino Amutio, ofrecer una patata de calidad y de temporada.
