18 profesionales de la agricultura y ganadería se han sumado a la producción ecológica en Álava el último año. Representan el 41% de las nuevas inscripciones en todo Euskadi. De ellos, siete se dedican a producción, seis a ganadería y cinco a elaboración de alimentos. En total, el territorio cuenta con 219 operadores inscritos que trabajan de manera ecológica algo más de cinco mil hectáreas.

Álava es el territorio vasco que más crece en producción ecológica

En general, el censo de Ekolurra ha experimentado un incremento del 1% en Euskadi, según los datos del Consejo de agricultura y alimentación ecológica de 2022. Y el mayor crecimiento se ha dado en Álava (41%). No obstante, Gipuzkoa sigue siendo el territorio con más agentes, mientras que la cifra cae en Bizkaia un 2%. Cabe destacar que el 86% de los inscritos ya se dedicaban con anterioridad al sector, y ahora han dado el paso de la producción convencional al modelo ecológico.

Álava es el territorio vasco que más crece en producción ecológica

A pesar de que el censo sigue su senda ascendente, el año anterior registró el menor crecimiento de su historia, en parte por la falta de relevo generacional. No obstante, el interés por obtener el certificado ecológico se mantiene y el Consejo recibió 90 solicitudes de información.

Con todo, “nos gustaría hacer hincapié en que todos los actores son necesarios y que aún queda mucho por hacer para cumplir la demanda de la estrategia De la granja a la mesa del Pacto Verde europeo”, subrayan desde el Consejo de agricultura y alimentación ecológica de Euskadi. La entidad hace hincapié en el potencial productivo que posee Araba en un sector “en el que es posible y necesario un cambio de modelo en los cultivos extensivos”, incide.

Y es que, ante la necesidad de combinar la calidad de los alimentos ecológicos con la producción local, a finales de 2021, el Consejo de agricultura y alimentación ecológica de Euskadi creó el distintivo Ekolurra, un sello que aparece junto al de la UE y que sirve para identificar los alimentos ecológicos salidos de los campos y ganaderías de productores de la tierra. De esta forma, busca el Consejo responder a una necesidad tanto de consumidores como de productores, ya que “recoge los valores de origen y calidad del alimento y permite dar un gran paso a favor de lo ecológico”, dice.

El triple de superficie

Y es que, la superficie destinada a la producción ecológica sigue al alza en Euskadi. Desde 2016, la superficie de campos certificados como ecológicos se ha triplicado. Actualmente, el 5% de las tierras agrícolas están certificadas, lejos aún del reto del Pacto Verde europeo, que consiste en conseguir que el 25% sean ecológicas en 2030.

A lo largo del pasado año, el Consejo de agricultura y alimentación ecológica de Euskadi certificó 1.199 nuevas hectáreas destinadas a la producción ecológica vasca, ocupando 9.104 hectáreas de suelo agrícola. El aumento más notable de superficie de tierras se ha dado en Gipuzkoa, con un incremento del 35%, debido a la inscripción de grandes ganaderos y ganaderas. Sin embargo, en Álava, el aumento es de un destacable 12%.

El sello Ekolurra casi se ha triplicado desde el año 2016 hasta hoy en cuanto a superficie de tierra certificada. Y, aunque el ritmo de crecimiento se ha ralentizado ligeramente respecto a cursos anteriores, mantiene la tendencia alcista, aumentando a un ritmo anual del 15% cuando en 2021, por ejemplo, el ritmo de crecimiento fue del 16%.

En estos momentos, el 5% de las tierras agrícolas de Euskadi están ya certificadas como ecológicas, cifra aún lejana al reto del Pacto Verde europeo. Sin embargo, analizando la superficie ecológica por producciones, la horticultura (19,20%) y la fruticultura (21,05%) se sitúan muy cerca del 25% requerido por la UE.

Con el objetivo de incrementar todavía más la producción ecológica, desarrollar redes de comercialización de alimentos transformados y aumentar la demanda de productos ecológicos autóctonos, se dará continuidad al fomento de la producción ecológica vasca durante el periodo 2023-2026. “Es imprescindible crear las condiciones para una mayor conversión ecológica en la que productores, administración y consumidores jugamos un papel importante”, explica Arantza Eguzkiza, presidenta del Consejo. “Dar pasos para desarrollar la estabilidad y la dignidad económica y social de productores y productoras es imprescindible tanto desde el punto de vista institucional como desde el socioeconómico”, añade.

También la producción animal mantiene una tendencia alcista del 8% con el incremento más notorio dentro de la cría de aves cárnicas y vacuno. Sin embargo, horticultura, fruticultura y viticultura son, una vez más, la ocupación de la mayoría de los profesionales vascos. “En estas tres actividades, el crecimiento está siendo continuado y constante, mientras que la comercialización e importación han bajado”, destaca el Consejo de agricultura y alimentación ecológica de Euskadi.