El diputado general de Álava ejerce con plena dedicación y pasión el cargo desde hace siete años y medio siendo consciente de que esa responsabilidad es algo que le acompaña “las 24 horas del día y los 365 días del año”, concreta Ramiro González a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA durante las dos jornadas que este periódico le ha acompañado en sus quehaceres cotidianos.

Ramiro González se reúne con su equipo para comenzar el día Alex Larretxi

“En una responsabilidad de este tipo uno es diputado general de Álava las 24 horas del día y durante los 365 días del año”

Esa fue una de las “responsabilidades” que interiorizó en 2015 al dejar de lado la toga y los trámites en el Juzgado como abogado especializado en Derecho Civil y Mercantil para convertirse en diputado general. Esa “vida volcada en el trabajo”, tanto en su anterior etapa como en la actual, logra encauzarla con el tiempo libre que disfruta junto a su familia en la apacible y tranquila localidad de Mendoza.

Ramiro González, Diputado General de Álava, asomado a la Plaza de la Provincia Alex Larretxi

“Aprovecho las ventajas de vivir en un pueblo con apenas un centenar de habitantes para estar en contacto con la naturaleza y salir mucho a pasear por los caminos de los alrededores”, desgrana saboreando un café en el bar de Mendoza a primera hora de la tarde. Incluso en jornadas dominicales en las que sale a correr por alguna de las sendas que parten desde Mendoza, su inseparable teléfono móvil o el reloj inteligente que porta en la muñeca se convierten en unas “máquinas horrorosas a donde no paran de llegar correos electrónicos”, indica con una sonrisa.

Ramiro González, vecino de Mendoza Alex Larretxi

“El compromiso es lo que más valoro de las personas y lo que menos me gusta o lo que más detesto son las deslealtades”

La rutina de cada jornada comienza temprano para el diputado general en su propio domicilio. Se sienta al volante de su vehículo para desplazarse a Gasteiz y acudir a su despacho de la Plaza de la Provincia. Antes ha revisado ya las ediciones digitales de los diarios locales para saber cuáles son los grandes titulares de la actualidad del territorio. Minutos después de las ocho de la mañana es habitual verle acceder por la entrada lateral de la Casa Palacio. “Una vez que llego al despacho, me gusta echar también un vistazo a las ediciones en papel de los periódicos para fijarme en algunos detalles concretos”, explica González.

Ramiro González lee el periódico en papel por las mañanas Alex Larretxi

“Siempre voy a recordar los duros momentos de la pandemia con todos confinados y centrados en cuerpo y alma en ayudar”

A partir de ese instante, acomete una primera reunión con su grupo de colaboradores más cercanos para abordar las cuestiones y actos que depara la agenda de la jornada. Hay también encuentros con algunos de los integrantes de su gabinete para revisar diferentes asuntos y recibe en el despacho a representantes de colectivos o asociaciones que solicitan un encuentro con el diputado general. “El día a día es una sucesión de actividades ya prefijadas, junto a otros imprevistos y asuntos que van surgiendo de manera espontánea”, relata el diputado general.

Ramiro González, Diputado General de Álava Alex Larretxi

“Cuando tengo un pequeño hueco en la agenda siempre trato de quedar con algún amigo para estar un rato y poder tomar un café”

Las citas de mayor calado político quedan encuadradas en la franja matinal, como la visita de inauguración oficial que giró el lunes al nuevo centro Arabarren en Lakua. Otra cita obligada cada martes es la reunión del gabinete foral, con la posterior comparecencia de prensa donde desgrana todos los temas relevantes y cuestiones que despiertan el interés. En horario vespertino se llevan a cabo actividades también de la agenda, como la organizada el miércoles por la Fundación Buesa y que reunió a la clase política para honrar la memoria del político socialista y su escolta, asesinados por ETA en el año 2000.

Ramiro González, vecino de Mendoza Alex Larretxi

“La desconexión del cargo la logro cuando estoy fuera de Álava viajando. Lo que más me gusta es conocer otros lugares y culturas”

En medio del ajetreo matinal, siempre encuentra hueco para un tentempié en forma de almuerzo “en algún local del entorno de la Diputación o en el propio despacho”, agrega. No olvida los tiempos duros de la pandemia cuando las restricciones convirtieron su despacho en el comedor habitual en medio de las intensas gestiones a las que obligó la explosión del coronavirus hace ya tres años.

Ramiro González paseando por Mendoza Alex Larretxi

Recorrer el territorio

“Los fines de semana me encargo de cocinar en casa y se me da relativamente bien. También suelo centrarme en las podas de árboles”

Teniendo la totalidad de Álava dentro de su acción de gobierno, otra de las pasiones del diputado general es recorrer el territorio de una a otra punta. “La mejor manera de estar al tanto de todo lo que sucede es acudiendo a un lugar en concreto. Además los alaveses son muy agradecidos con este tipo de visitas”, reconoce Ramiro González. Esta afición a devorar kilómetros por la geografía alavesa le ha llevado a “convertir el coche en la oficina” en los trayectos de una hora hasta Oion o los 40 minutos, por ejemplo, para visitar Amurrio. La mayoría de los días recorre de vuelta los 15 kilómetros que separan Gasteiz de su domicilio “entre las ocho y las nueve de la noche”, precisa el vecino asentado en el “oasis perfecto” de Mendoza desde hace más de dos décadas.

Ramiro González, vecino de Mendoza Alex Larretxi

En el refugio y la intimidad de su domicilio, no es extraño verle defendiéndose “relativamente bien” delante de los fogones y conciliar con las tareas propias del hogar. Recuerda en esos momentos “los platos tradicionales, como los callos, lentejas o hígado” que preparaba su madre. Así termina la jornada el vecino de Mendoza, “abogado vocacional” y diputado general de Álava, “convencido de los valores y la utilidad de la política en general”.