La Cofradía de la Virgen Blanca ha recuperado una pequeña imagen de la Virgen Blanca, ubicada en el barranco de Oka. Una figura que se rompió y que la entidad volverá a colocar en su sitio este fin de semana para ponerla, de nuevo, en la hornacina, tras su restauración.

Por tal motivo, la Cofradía ha organizado una salida mañanera para este domingo 2 de octubre a la que invitan a participar a la ciudadanía en general. La salida será este domingo a las 10.00 horas desde el parking del antiguo Eroski de Asteguieta en coches particulares.

Se repondrá la imagen de la Virgen Blanca en Okarrate "en armonía y buena unión", con bendición, txistus y un hamaiketako de tortilla de patata y vino de Rioja alavesa. Mediante un comunicado, la cofradía ha explicado que la figura está situada en el camino de Martioda a Zuia, conocido como el 'Camino de Romeros' por el barranco de Oka.

Ahí reside, junto a una encina, dentro de una hornacina de metal y cristal. Una humilde, pero emblemática imagen de la Virgen Blanca que guía el camino de los senderistas desde el 31 de mayo de 2006. En esa fecha, la Cofradía de la Virgen Blanca, con su capellán entonces José Antonio Goitia al frente, realizó una visita a la misma para realizar su bendición y reconocimiento a esta devoción mariana. Un vecino del lugar la colocó en su día de forma anónima y sigue cuidándola y visitándola, ya que nunca le han faltado flores.

"Cuantos paseantes que recorren el citado barranco de Oka, se detienen junto a la encina y dedican a nuestra patrona, unos minutos de silencio y oración". Y es que, como expone la cofradía, a veces, esta devoción espontánea, hace que "las mañaneras por nuestro maravilloso paisaje alavés, sean mucho más felices y cercanas".

Ermita de Urrialdo

Durante la salida se visitarán también las ruinas de la cercana ermita de Urrialdo de mano del arqueólogo e historiador Ramón Loza Lengaran, quien realizará una visita guiada para contar su historia a los asistentes. Una iglesia que, como recuerda la cofradía en palabras de Enrike Knörr, fue sitio de culto de una aldea que figura en la famosa relación 1025 dentro de la comarca de Dibiña.