Poca precipitación, mucho calor, una vegetación que comienza a marchitarse y mucha actividad humana en el campo y el monte son los ingredientes perfectos para que salte la chispa de los incendios forestales, un fenómeno que no castiga al territorio alavés con la virulencia con la que lo hace en Galicia o en las riberas del Mediterráneo, pero cuya amenaza está presente también aquí, especialmente en un año en el que, al menos de momento, la lluvia apenas se deja ver. Sin ir más lejos, el sábado los Bomberos Forales de Álava tuvieron que sofocar un fuego en Llodio y el martes otro en Maeztu, y el 22 de mayo los servicios de extinción acudieron a apagar sendos incendios en los municipios de Lapuebla de Labarca y Elciego.
Javier Alvez, jefe de Bomberos del parque de Aguirrelanda, explica a DIARIO NOTICIAS DE ÁLAVA cómo se preparan los profesionales para hacer frente a los incendios forestales, con qué materiales cuentan y qué debe hacer la ciudadanía para minimizar en lo posible el riesgo de un fuego en el campo.
Para empezar, recuerda que el estío no es la época más peligrosa en Euskadi. “El nivel de riesgo mayor de incendios forestales es en invierno, cuando tenemos vientos del sur y la hoja está caída, lo cual no quita para que en verano también tengamos fuegos forestales, porque hay más actividad en el monte, el campo está seco, es época de cosechas, y todo influye para que haya más incendios”.
Este año en concreto, y aunque “todavía es pronto” para definir un escenario, Aemet ya ha constatado que hemos tenido un mayo “muy seco, no ha llovido casi nada, y eso conlleva mayor riesgo”.
De cara a estar preparados, en el parque de Aguirrelanda aumentan en esta época las maniobras con camiones para la extinción de incendios forestales, se trabaja “el tendido de mangueras y las técnicas de extinción, y se revisan todos los materiales para solventar una eventual emergencia lo más rápido posible”, afirma Alvez.
Entre esa dotación específica el parque de bomberos de Vitoria cuenta con un Unimog, una bomba forestal sobre un chasis Mercedes; y un tanque forestal. Además, están “los EPI de los bomberos y diversos materiales y herramientas, como batefuegos o mochilas, todo lo necesario para intervenir y apagar el fuego”.
Tipos de incendios En el Parque de Bomberos de Vitoria trabajan en “coordinación total” con los Bomberos Forales, pero a la dotación de Gasteiz le corresponde efectuar la primera salida en todo el término municipal de Vitoria, inmenso en cuanto a superficie, lleno de fincas agrícolas y con los Montes de Vitoria y sus espesos bosques como frontera sur. Además, les corresponde la primera salida en la zona de Gorbeialdea.
Javier Alvez explica que las salidas al campo cubren todo tipo de incendios. “Hay fuegos en fincas, porque en época de cosecha puede haber más riesgo por la maquinaria, por roces con las cuchillas, que se pueden calentar y provocar una ignición en el cereal, pero también hay incendios en el monte, causados por gente que hace fuego, por espejos o por vidrios”, explica. Además, “el ferrocarril, los trabajos de mantenimiento de carreteras, la típica colilla del conductor, pueden causar un fuego, y dependiendo de las condiciones climatológicas se pueden complicar mucho las cosas”. Por eso, señala, “es importante que el aviso sea lo más rápido posible para que se pueda actuar cuanto antes”.
Consejos a la ciudadanía Los bomberos actúan cuando la chispa ya ha prendido, pero la prevención es el mejor agente extintor y por ello Javier Alvez lanza una serie de consejos a la ciudadanía. “Estamos ya en periodo de mucha peligrosidad y habría que evitar totalmente cualquier actividad que pueda causar fuego”, explica. Por ejemplo, se debe evitar dejar basura en el monte. “Hay que meter los residuos en una bolsa y llevárnoslos; si dejamos vidrios, colillas u otro material eso puede generar ignición, aparte de la contaminación del monte”, apunta el jefe de bomberos de Gasteiz, quien recuerda por otra parte que, “lógicamente, está prohibido hacer fuegos o barbacoas”.
