A escasas fechas de la reglamentaria renovación de la Interprofesional del Vino de Rioja y, en paralelo, de la composición del Consejo Regulador que rige los destinos de la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja y la entrada en la presidencia de un representante del sector productor, en el grupo de los grandes bodegueros analizan los últimos años de un sector golpeado por la actual crisis sanitaria.
¿Cómo han sido los últimos meses?
-Contemplamos el proceso con cierta normalidad. Las asociaciones del Rioja, tanto bodegueros como productores nos examinamos cada cuatro años de todo lo que hemos ido trabajando y realizando en ese periodo y ahora toca renovar. Toca que las bodegas valoren el trabajo que hemos hecho cada asociación para aglutinar esas valoraciones, coger esos apoyos que nos hacen consolidar o incrementar, si es posible, nuestra representatividad para los próximos cuatro años.
Algo que también se renueva cada cuatro años es la presidencia de la Interprofesional y el Consejo.
-Así es. Cada cuatro años le toca al sector comercial, otros cuatro al sector productor, por lo que ahora termina la presidencia de Fernando Salamero que, además de ser el presidente del Grupo Rioja, fue el propuesto para el sector comercial. Ahora toca elegir un presidente entre los productores.
¿Qué balance hacen de estos cuatro años?
-Han sido cuatro años muy complicados por muchos factores. Arrancamos la legislatura en el año 2017 con esos problemas tan importantes que nos generó de pérdida de producción, de incremento del coste de materia prima muy importante y con el consiguiente efecto negativo en el mercado. Y lo vamos a cerrar con la pandemia, que desde marzo de 2020 nos viene golpeando de forma muy intensa.
También se puede hablar de logros.
-Claro que sí. Teniendo en cuenta lo complicados que han sido estos cuatro años, todavía es más relevante el valor de lo conseguido. Creo que en el Consejo Regulador y promovido por el Grupo Rioja, se han conseguido cuestiones tan relevantes como era la creación de los viñedos singulares, se ha mejorado lo que era la mención de zona y se ha creado la de municipio. Se trata de factores muy relevantes que van a contribuir al futuro de Rioja.
En este período también se ha dado luz verde a una nueva elaboración.
-Así es, también se aprobó la posibilidad de elaborar espumosos amparados bajo la Denominación de Origen Rioja, lo mismo que se mejoraron los tiempos de crianza, las reservas y los blancos. Creo que ha sido un conjunto de medidas muy relevantes que han culminado con el Plan Estratégico 2021-2025, que va a marcar la línea de trabajo durante los próximos cinco años.
¿Al final, un balance positivo?
-Teniendo en cuenta las dificultades que hemos pasado durante estos cuatro años y todas las iniciativas que se han desarrollado, creo que hay que hacer una valoración muy positiva del trabajo que se ha hecho en el Consejo Regulador.
Sobresaltos ha habido muchos en este tiempo, pero los aranceles y el 'brexit', ¿han sido los más duros?
-Sin duda. Después de arrancar en 2017 con ese incremento de precios de la materia prima, que conllevó una pérdida de competitividad en el mercado, con importantes descensos de ventas en los dos primeros años, en 2018 apareció el efecto del brexit y de los aranceles en EEUU, que se comenzaron a aplicar en el año 2019. A continuación, surgió la pandemia, con lo que durante estos cuatro años siempre hemos vivido efectos negativos que han complicado mucho la comercialización del vino en general. Si vemos los efectos que hemos sufrido, la realidad es que ha sido una pérdida importante, aunque este último, con un descenso de ventas de volumen de solo un 8,43 por ciento podemos darnos por satisfechos y es una prueba de la fortaleza del Rioja.
¿La entrada en la presidencia del sector productor puede traer novedades para el viñedo riojano?
-Creo que al final no tiene tanta incidencia el cambio de una presidencia del sector comercial al sector productor. Hay que recordar que no es una presidencia ejecutiva, sino que es representativa. Teniendo en cuenta el altísimo grado de consenso que se necesita en el Consejo para sacar un tema adelante, ya que se necesita el 75% de los votos positivos para ello, hace que cualquier tema necesite el apoyo de los dos sectores. Por eso, la incidencia de que la presidencia sea de un lugar o de otro, no es tan relevante para que se desarrollen proyectos de bodegas o de viñedos.
De hecho, el viñedo ha sido protagonista de muchas decisiones.
-El ejemplo más claro es que durante la presidencia de Fernando Salamero, uno de los grandes impulsos ha estado en el tema de viticultura, como ha sido la creación del viñedo singular y el tema de la mención de zona o municipio que son claves para buscar una mayor segmentación de los vinos de la Denominación de Origen.
"En 2018 apareció el efecto del 'brexit' y de los aranceles en EEUU, que se comenzaron a aplicar en el año 2019"
"Uno de los grandes impulsos ha estado en el tema de viticultura, como ha sido la creación del viñedo singular"