- Ayer, la hostelería y la restauración pudo reanudar su actividad, clausurada desde el 6 de noviembre por el covid-19. La reapertura de uno de los sectores más golpeados por la pandemia sanitaria llega, sin embargo, con importantes restricciones, ya que los locales tienen que cerrar antes de las ocho de la tarde y no abrir antes de las seis de la mañana. Dentro, los clientes tienen que tomar sus consumiciones sentados en una mesa con un aforo máximo en el interior del 50%. Fuera, en las terrazas al aire libre, la entrada es libre.
Además, los consumidores pueden comer y beber a lo largo y ancho de los establecimientos hosteleros del territorio, ya que la movilidad de las personas queda permitida dentro de Álava, pero no pueden potear en los locales de los municipios de Aramaio, Iruña Oka, Ribera Baja y Zuia, que tienen una población inferior a los 5.000 habitantes y una situación epidemiológica que requiere, según el Gobierno Vasco, la no apertura de bares y restaurantes. Un revés para los negocios que en Bizkaia afecta a Arrigorriaga y Ermua y en Gipuzkoa a Eibar, Arrasate y Ordizia.
Además, en Gasteiz, los locales de la Kutxi, en el Casco Viejo, han decidido mantener cerrados sus establecimientos durante el fin de semana. En el resto de la ciudad, la mayoría reabrió ayer sus puertas, aunque también hay negocios que siguen cerrados porque sus responsables aseguran que no les merece la pena con las nuevas restricciones de aforo y horario.