vitoria - En los pueblos conocen la eficacia de los murciélagos para combatir el exceso de insectos en determinadas épocas del año. De hecho, en los últimos meses, tanto la Cuadrilla de Rioja Alavesa como el Ayuntamiento de Navaridas han dedicado jornadas de sensibilizacion y divulgación a la necesidad de proteger a estos animales, con una interesante participación de personas de todas las edades. Ahora ha sido el grupo de investigación Ecología del comportamiento y Evolución en murciélagos quien ha publicado dos investigaciones científicas que demuestran el potencial que tienen estos animales para reducir y eliminar plagas agroforestales.

Por un lado, han podido determinar que son varias las especies de murciélagos que se alimentan de la procesionaria del pino. Y, a su vez, han descubierto que una sola especie consume muchas de las plagas que asolan los viñedos y otros cultivos de importancia tan extendidos en Rioja Alavesa y, en general, en el País Vasco y su entorno.

La procesionaria y otros tipos de insectos preocupan y mucho en esta época no sólo a los agricultores a los que afecta directamente sino a la sociedad en general. Las plagas acaban con entre el 20 y el 50% de la producción agrícola mundial y las pérdidas económicas son importantes. En ese sentido, las inversiones para hacer frente a este tipo de insectos y la búsqueda de soluciones traen de cabeza a profesionales e instituciones. Basta señalar que este mismo año, la Diputación encargó fumigar 930 hectáreas de pinares, aunque son más de 3.000 las que están afectadas.

Ante la gravedad de este problema y los que plantean otros insectos, el grupo de investigación de la UPV/EHU compuesto por Joxerra Aihartza, Inazio Garin, Urtzi Goiti y Unai Baroja ha realizado un amplio estudio que viene a demostrar que entre nosotros se encuentran algunos de los depredadores naturales de estas plagas, los murciélagos.

Entre viñedos Desde finales de abril hasta septiembre del año 2017, este equipo de investigación recogió periódicamente de manera no invasiva excrementos de murciélagos en diferentes colonias de Rioja Alavesa. “El análisis genético de dichas muestras ha permitido constatar la presencia de 55 plagas agroforestales en las heces del murciélago pequeño de herradura, 25 de las cuales son consideradas potencialmente importantes para los cultivos”, asegura Unai Baroja, investigador de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UPV/EHU y autor del artículo. Estos resultados indican que los murciélagos están alimentándose de muchas de las plagas más importantes de la región y resaltan su potencial como reguladores de las mismas.

La segunda investigación, realizada en distintas zonas forestales de la península se ha centrado en la procesionaria del pino, plaga cuyas larvas afectan sobre todo a pinos, abetos y cedros. Este estudio también ha resaltado el potencial de estos mamíferos alados para la regulación de esta plaga. La procesionaria, además de afectar a los árboles, es muy peligrosa para seres humanos y animales, debido a que los pelos urticantes que los cubren pueden causar irritaciones, reacciones alérgicas e incluso problemas respiratorios y la muerte de mascotas u otros animales.

A diferencia del trabajo anterior en Rioja Alavesa, en esta investigación para poder recolectar las muestras fecales tuvieron que capturar a los murciélagos con redes especiales y posteriormente introducirlos en pequeñas bolsas de tela. “Es curioso, pero de esta manera se suelen calmar, ya que la oscuridad y el abrigo les hacen sentirse seguros. Una vez relajados defecan y así podemos recolectar sus heces para después liberarlos sin dañarlos”, explica Baroja. En este caso se analizó la dieta de 10 especies de murciélagos y se descubrió que 7 de ellas habían consumido la procesionaria.

Ambas investigaciones abren la puerta a otro tipo de solución natural frente a las plagas: mediante acciones encaminadas a conservar los murciélagos se consigue reducir el uso de agroquímicos. “Estos productos químicos son directa e indirectamente perjudiciales tanto para el ecosistema como para el ser humano, y cada vez son más las plagas que se han vuelto resistentes a estos, por lo que es necesaria la búsqueda de alternativas que respeten el medio natural”, avisa Baroja.

El investigador clama también contra la mala fama de estos mamíferos: “la mayoría de las más de 1.300 especies de murciélagos registradas en el mundo son insectívoras. Solo una se alimenta de sangre de mamíferos (ubicada en América), y raramente de seres humanos. La mala fama de estos animales, por tanto, es infundada. Por el contrario, son completamente necesarios para el equilibrio de nuestro ecosistema y combaten las plagas de insectos que asolan cultivos y bosques, por lo que resultan una opción rentable y nada tóxica”.

En nuestro territorio, este mismo año se aprobó el plan de gestión conjunto de los quirópteros que habitan refugios subterráneos y edificaciones en el País Vasco, además de que el catálogo de especies protegidas en Euskadi ya contempla la protección de los murciélagos.

Rioja Alavesa. En los pueblos conocen la eficacia de los murciélagos para combatir el exceso de insectos en determinadas épocas del año. Tanto la Cuadrilla de Rioja Alavesa como el Ayuntamiento de Navaridas han dedicado jornadas de divulgación a proteger a estos animales.

Investigación. El grupo de investigación Ecología del comportamiento y Evolución en murciélagos ha publicado dos investigaciones científicas que demuestran el potencial que tienen para reducir y eliminar plagas.