Las fiestas de los barrios de Vitoria siguen y este fin de semana es el turno del barrio de El Pilar. El programa comenzó con un campeonato de petanca y finalizará mañana tras un fin de semana completo de actividades.
Ayer, la jornada festiva despertó con la gymkana ciclista en la que participaron escuelas de ciclismo de Álava en la calle Caracas. En la prueba, ciclistas de entre 7 y 14 años tenían que superar varias pruebas de habilidad. El club ciclista Aranako fue el responsable de organizar todas el evento. Maxi Tulebras, entrenador del club, explicó que esta prueba es la última que se suele organizar para dar cierre a la temporada de ciclismo.
Por su lado, el escenario de la calle Panamá se llenó de puestos de productos artesanales en una concurrida feria. Mayoritariamente, los artesanos ofrecieron todo tipo de comida, aunque también se pudo encontrar algún puesto de ropa y complementos, como en Ilargi. Y no sólo había productos locales, también se podía comprar comida de otras localidades, como tortas de La Rioja o queso de Asturias y Navarra. Para el mediodía ya se empezó a mover la gente del barrio por los diferentes puestos, aunque el ambiente andaba todavía flojillo. Y es que “a la gente le cuesta salir de casa”, subraya Leire Belaustegi, de la pastelería Goiuri. Aun así, recalca que se nota que el vecindario está deseando ver algo diferente en el barrio. Como el baloncesto, que también estuvo muy presente en todo el día de ayer. Por la mañana comenzó el partido amistoso entre el C.B. Araba y el Campus Promete de Logroño, y aunque fue un amistoso, estuvo bastante reñido, sobre todo en los tres primeros cuartos, tal y como explica Cristina Hernández, entrenadora del equipo riojano. “En el último cuarto, las locales han metido caña”, explica. No obstante, eso no les hizo derrumbarse, ya que “el partido estuvo bastante entretenido y las jugadoras lo disfrutaron al máximo”, indica la entrenadora. Pero el verdadero alboroto de la jornada festiva estuvo, sin duda, en las barracas de la plaza de la Constitución con decenas de niños y niñas en un continuo atracón de atracciones que tendrá su cénit mañana por ser el día de precios bajos.