La vuelta al cole ha empezado y, con ella, las caras nuevas entre los nuevos compañeros de pupitre, pero también entre las que se ven por los despachos y claustros, a tenor de los 24.000 profesores de educación Primaria y Secundaria que se calcula que hay en la comunidad autónoma vasca (CAV), de los que algo más de 15.500 son funcionarios y, el resto, profesores interinos, esto es, temporales, de acuerdo al informe bianual del consejo escolar de Euskadi, centrado en el periodo 2015-2017.
A juicio de Denon Eskola, la federación de asociaciones de padres y madres de la escuela pública alavesa, la inestabilidad de las plantillas es un riesgo para la calidad de la enseñanza. Un mal que, según explica su presidenta, Lurdes Errasti, afecta a los colegios de las zonas rurales del territorio, por lo que pide políticas públicas que entiendan la educación como un derecho, con una financiación adecuada que lo garantice, para construir un sistema más equitativo que evite así el agravio comparativo entre ciudad y pueblos. “El tema de la inestabilidad del profesorado nos afecta. En Álava es donde más centros escolares se han abierto en los últimos tiempos y, sin embargo, es donde menos profesorado tenemos”, censura la presidenta de Denon Eskola.
¿De dónde vienen estos docentes? Sobre todo -detalla- de Gipuzkoa y Bizkaia. “Lo que pasa es que Vitoria es una capital y está más o menos bien comunicada, por lo que aquí puedes ir y venir todos los días a trabajar, pero si tienes que ir a Campezo o a Valdegovía, la cosa se complica, así que en cuanto pueden, piden cambio de destino para volver a su casa”, lamenta Errasti, para quien eso no es calidad en la enseñanza, ya que “se sobrecarga a los profesores que se quedan y, además, el niño piensa: “Éste, si se va a ir pronto, ¿para qué voy a estudiar yo nada, si está de paso? Y eso, no ayuda a motivar ni a tener un programa de estudios con una continuidad”. Por ello, han decidido que la fiesta de la escuela pública vasca del próximo 6 de junio se haga en Labastida con el fin de reivindicar la enseñanza rural.
Rioja Alavesa La presidenta del Ampa El Fabulista, del IES Samaniego de Laguardia y miembro de la plataforma en defensa de la escuela pública vasca en Oion, Belén Arribas, destaca que “como en toda Rioja Alavesa, la inestabilidad del profesorado en los centros de Primaria y Secundaria es un tema que nos preocupa y en el instituto este problema yo creo que es mayor, ya que una gran parte del profesorado acude desde otras provincias del País Vasco o de La Rioja”.
En este sentido, Francisco Bengoetxea, director del IES Samaniego, que este curso ha pasado de tener 352 a 370 alumnos, junto a su vicesecretaria, Elena Ramírez, remarca que su principal problema es lo lejos queda su centro de todo. “Aquí hay profesores de Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y La Rioja, incluso algún navarro, pero, sobre todo, predominan los de Bizkaia y Gipuzkoa. Y es un problema tener que ir y venir todos los días. Ahora el tiempo es hasta agradable, pero luego, el invierno es muy largo, aunque hay otros que alquilan pisos”, señala.
Por eso, lo habitual -dicen- es que vuelvan a su lugar de origen. “Muchos están un año entero, porque eligen la vacante del curso, pero si al año siguiente pueden elegir más cerca de casa, evidentemente lo hacen”. Para Bengoetxea, esto poco a poco va cambiando gracias a programas como Hamaika esku, del Gobierno Vasco, destinado a centros con bajo rendimiento escolar, ya que en su caso ha conseguido dar continuidad a 6 o 7 docentes. Y pese a contar con esos maestros, “creo que el profesorado estable no va a llegar este curso ni a un tercio. Calculo que entre Hamaika esku y los funcionarios estables, podemos llegar a ser un 40% de la plantilla. Y si no hubiera sido por ese proyecto, aún hubiese sido bastante menos el porcentaje”.
Por su parte, el director de la escuela pública de Labastida, Iñigo Beristain, resalta que aunque siempre en su centro ha habido mucha inestabilidad entre el profesorado, “en estos momentos hemos conseguido mejorarlo gracias a las comisiones de servicio, por las que se presenta un proyecto que encaje con el planteamiento del centro y los profesores mantienen la plaza”, en este caso en Labastida. “Y para nuestro centro, desde luego ha sido fundamental porque, de lo contrario, una persona que ha llegado a colegio, aunque se ilusione con nuestro proyecto, como tiene pocos puntos, de cara a las adjudicaciones de personal, no podría acceder nuevamente al centro porque otra con más puntos se adelantaría”, precisa.
Respecto a la procedencia de su plantilla, de los 13-14 docentes que tiene actualmente, cuatro proceden de Bizkaia, aunque el resto, es decir, la gran mayoría, también se tienen que mover porque viene de Vitoria, “por lo que recorren 30-40 minutos en coche todos los días”, tal y como especifica Beristain, porque solamente tres personas viven en esta localidad de Labastida o cerca de ella. En cualquier caso, su mejoría es notable. “Ahora, hemos conseguido mantener tanto el equipo directivo como el claustro y la clave es que estamos llevando adelante un proyecto muy interesante de transformación educativa, que busca la inclusión, que es tan enriquecedor, que a nivel profesional y personal, compensa el kilometraje. Y esto estabiliza más la plantilla”, subraya.
Vitoria - En las calles Beato Tomás de Zumárraga, Domingo Beltrán y Badaia se encuentran casas de apuestas a menos de 100 metros. Y su caso no es el único porque la historia se repite en Abendaño, Coronación, Casco Viejo y en otras zonas de la capital, teniendo en cuenta que en Vitoria, ahora mismo hay 28 salones de juego, con otros dos más pendientes de abrir, y a los que se suman cuatro locales de apuestas y otro más, pendiente de abrir la persiana, según los últimos datos aportados por el departamento de Seguridad.
Ante las quejas de barrios como Txagorritxu y Judimendi, el Pleno del Ayuntamiento de Vitoria acordó el 23 de noviembre del pasado año regular de manera más estricta estos locales, tras la aprobación de una moción, que presentó Podemos e Irabazi, con el objetivo de trabajar, junto al Gobierno Vasco, en limitar la apertura de estos negocios.
La propia federación de asociaciones de padres y madres (Ampas) de la escuela pública alavesa, Denon Eskola, reconoce estar especialmente preocupada por este problema, debido a lo cerca que quedan de varios centros escolares y teniendo en cuenta, que los índices de adicción al juego, entre los menores de 25 años ha pasado en los últimos cinco años de un 6% a un 25%. En Gasteiz, Asajer, la asociación alavesa de jugadores en rehabilitación, advierte además que el 7-8% de los casos atendidos corresponden a menores de 30 años, con problemas relacionados con las apuestas deportivas presenciales y online y con el póker, fundamentalmente.
Aprender a convivir Para Asajer, la mejor forma de ayudarles es hacerles ver que tienen un problema y que el afectado lo reconozca, para que lo ayuden. “Pero la prevención del juego es fundamental y por eso una de las cosas que intentamos hacer es poder acercarnos a la escuela para poder hablar del juego y sus dificultades”, explica Idoia Axpe, psicóloga de Asajer. De ahí que “la parte educativa” sea muy importante, “para no sólo preocuparnos de algo que está ahí, sino para empezar a trabajar con los chicos y chicas con algo que no va a desaparecer, para intentar que conozcan el tema y que se les pueda ayudar a manejar estas situaciones”.
La formación, por tanto, es la mejor herramienta contra los juegos de azar y las casas de apuestas, tal y como se ha hecho antes, como recuerda, con el alcohol, drogas y tecnologías. “Por eso, insisto en que tenemos que aprender a vivir con ello y a manejar la situación”, reitera Axpe. Especialmente, en el caso de las apuestas, “se está complicando mucho por lo fácil que es ahora acceder y por lo que se han querido asociar a deporte y publicidad”. A.S.
Bingo. A 13 de septiembre de 2019, según los datos aportados por el departamento vasco de Seguridad a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, hay tres locales de este tipo en Vitoria.
Salones de juego. En Álava, en total, hay 31 establecimientos de este tipo. La capital alavesa concentra la mayoría de ellos, con 28 (siete de ellos habilitados como locales de apuestas). El resto, se distribuyen entre Amurrio (1), Etxabarri-Ibiña (hay uno y está habilitado como local de apuestas) y Llodio (1). Pendientes de apertura hay dos en Vitoria y uno en Llodio.
Locales de apuestas. En estos momentos hay cuatro dados de alta en Vitoria a los que habría que añadir uno más que está pendiente de apertura.
Asajer. Los casos relacionados con la adicción a las apuestas deportivas o al póker son los que más suele atender esta asociación alavesa entre los menores de 30 años.
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Son los locales de juego pendientes de abrir en la capital alavesa.