Segundo Dividendo Digital. El cambio de frecuencias de la TDT se produce como consecuencia de la liberación del llamado Segundo Dividendo Digital. En cumplimiento de las obligaciones impuestas por la Unión Europea hay que liberar la banda del espectro radioeléctrico comprendida entre los 790 y 694 Megahercios (MHz), ahora ocupada por la TDT, para permitir ahí el despliegue de las futuras redes de telecomunicaciones 5G. Esta intervención llega después del anterior dividendo de 2014 donde hubo que ajustar también las antenas. Con los cambios que deben estar finalizados para el 30 de junio de 2020, se asegura no volver a actuar sobre las antenas, como mínimo hasta el año 2030.

Subvenciones. La actualización de las frecuencias va a contar con ayudas para cada comunidad. Oscilarán entre los 104,3 y los 677,95 euros, en función de la infraestructura instalada.

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Nueva ubicación de Tele 5. La cadena de Mediaset emite en la actualidad por el canal 45, pero deben de mudarse a esta nueva frecuencia.

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Cadenas nacionales. A través de este canal se sintonizarán las emisiones de cadenas nacionales que hasta ahora lo hacen por el número 49.

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Canales locales. Las emisiones de las cadenas centradas en la actualidad más cercana mudarán a esta nueva frecuencia desde el 56 donde lo hacen ahora.

Vitoria - La incesante evolución tecnológica va a obligar a las miles de antenas que coronan los tejados de Gasteiz a tener que reajustarse para poder captar la señal de los diferentes canales de Televisión Digital Terrestre (TDT). Solo han pasado cinco años desde que hubo que pasar por una situación idéntica, pero ahora toca de nuevo recurrir a los servicios técnicos especializados para llevar a cabo los ajustes técnicos pertinentes y que los propietarios de cada vivienda actualicen después el listado de los canales en su receptor.

El pasado 24 de julio arrancó en todo el territorio nacional el plazo otorgado que ubicará a todos los canales en sus nuevas frecuencias antes del 30 de junio de 2020 y sin la posibilidad de obtener ningún tipo de prórroga. La razón hay que encontrarla en el cumplimiento de las obligaciones impuestas por la Unión Europea para el denominado segundo dividendo digital.

Se trata de ir dejando libre la actual franja del espacio radioeléctrico, desde los 694 a los 790 megahercios (MHz) para permitir el despliegue, en ese margen de frecuencias, de las redes 5G de comunicaciones inalámbricas. Este nuevo acomodo de los canales ha arrancado en puntos como Mallorca, Ibiza, Formentera o diversos municipios de Cáceres y Huelva.

En lo referido a las miles de antenas desperdigadas por los tejados de Gasteiz no hay todavía una fecha de inicio de las actuaciones. Las diferentes fases marcadas por la Secretaría de Estado para el avance digital no incluyen un mes exacto para acometer las labores. En septiembre sí se ha marcado como la fecha de arranque en Gipuzkoa, “pero de Álava no se sabe nada concreto”, explican a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, los profesionales de la firma Araba, ST. Todo hace indicar que será a partir de noviembre cuando pueden generalizarse las actuaciones en la capital alavesa, aunque las prioridades de los antenistas se centran en “arrancar en el mes de septiembre para evitar los problemas de desabastecimiento que ya padecimos hace cinco años, con el anterior dividendo”, remarcan desde Araba.

amplificador o reprogramación La adaptación de las antenas a la nueva ubicación en el espacio radioeléctrico no va a suponer tener que reorientarlas hacia un punto concreto para recibir la señal. “La intervención se va a centrar en colocar tres amplificadores en la antena o reprogramar la central de captación de señal, en las comunidades que tengan este sistema”, relata a DNA el experto consultado.

Finiquitado este primer paso, llegará el turno para los particulares de resintonización automática de todos los canales y su ubicación en la nueva banda de frecuencia. “Se trata de una intervención pequeña en cada comunidad”, tranquiliza el responsable de la firma Araba. A nivel de detalle técnico esta reubicación de canales entre los 470 y los 694 megahercios “va a afectar en Álava a las cadenas que emiten por encima del canal 48”, concreta. Las emisiones que llegan por los canales 49, 56 y 58 son las tres directamente afectadas en todo el territorio. “El 49 y el 58 están reservados para las emisiones de cadenas nacionales y por el 56 lo hacen los canales locales. El cambio llevará a ubicarlas en los canales 21, 30 y 42. En el caso de los diversos canales de Euskal Telebista, que emiten por el 58, se trasladarán hasta el 45. Hasta ahora Telecinco ocupaba ese espacio y el cambio va a obligar tener que mudarse hasta el canal 21”, desgrana el antenista de Araba.

Los movimientos en las diferentes franjas se completan con el traslado de las frecuencias de las cadenas locales al canal 42, mientras las cadenas que hasta ahora lo hacen en la franja del 59 pasarán a ocupar la del dial 30. Después de esos cambios, cada vecino deberá volver a resintonizar los canales, aunque no se perderá ninguno de ellos. Quedarán excluidas de esta adaptación de antenas las viviendas individuales, donde únicamente se deberán resintonizar los televisores. Con el fin de facilitar la transición y minimizar el impacto para la ciudadanía, durante un tiempo las cadenas de televisión emitirán simultáneamente a través de las frecuencias nueva y antigua (simulcast) antes de proceder al apagado de esta última.

Este nuevo movimiento en el espacio radioléctrico garantiza estabilidad, al menos, hasta el año 2030 sin que se intuyan a lo largo de la próxima década nuevas operaciones de dividendos digitales. Desde que la administración les avise, las comunidades de vecinos van a disponer de un plazo de medio año para adaptar sus instalaciones de antenas. Está aprobada la concesión directa de subvenciones por valor de 145 millones de euros. El volumen de los cambios afectará a cerca de 850.000 edificios y 21 millones de habitantes. Se han previsto ayudas que oscilan entre los 104,30 y los 677,95 euros, en función de la instalación de la que dispone la comunidad.

“La colocación de los amplificadores en la antena puede suponer unos 260 euros, mientras que reprogramar la central es más económico y asciende a poco más de 100 euros”, precisa el especialista de la firma Araba consultado por DNA.