vitoria - Las reacciones a la sentencia condenatoria del Tribunal de Cuentas contra Alfonso Alonso y Javier Maroto no se hicieron esperar ayer. La inmensa mayoría contundentes y llenas de reproches, algunas de ellas incluso exigiendo la asunción de responsabilidades políticas por parte de sus protagonistas, como en los casos de EH Bildu o Podemos, otras con el regusto agridulce de que esta condena se ha hecho esperar mucho tiempo. Fue éste el caso del alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran, quien no dudó en vincular las actuaciones del PP en el Ayuntamiento con las que lo han marcado social y judicialmente como partido en otras latitudes del Estado. “Esta condena es un hecho muy grave, algo que sucede con frecuencia en el Partido Popular. Queda claro que el PP de Vitoria y Álava, de Alonso y Maroto, desgraciadamente, no es nada diferente a la peor versión del PP de Valencia o Madrid”.
A juicio del primer edil vitoriano, “con esta sentencia ha quedado demostrado que la actuación de Alfonso Alonso y Javier Maroto fue muy perjudicial para el interés público y para las arcas del Ayuntamiento”. La resolución del Tribunal de Cuentas, que condena al gobierno municipal del PP como responsable directo de un perjuicio de casi 400.000 euros para las arcas municipales, demuestra según el alcalde “con quién pierde Vitoria”. “Vitoria pierde con Maroto, con Alonso y con el PP”, dándole la vuelta al lema electoral con el que el exalcalde concurrió a las últimas elecciones municipales.
“En el PNV, tanto cuando estábamos en la oposición como ahora en el gobierno municipal, siempre hemos considerado que el contrato de alquiler de los locales de San Antonio era muy lesivo y no defendía el interés de la ciudad. En 2013 planteamos una solución razonable al entonces equipo de gobierno, revisando el contrato y negociando con el propietario, o en su caso acudiendo a los tribunales para moderar las penalizaciones que contempla el contrato en caso de rescisión. Lo único que recibí en respuesta a aquella propuesta en positivo fue una negativa, además de muchas descalificaciones. El PP y Maroto no nos dejaron otra vía que acudir al Tribunal de Cuentas para defender nuestra ciudad. Hoy -por ayer-, después de casi tres años, el Tribunal nos ha dado la razón, no sólo al PNV y PSE, sino a la mayoría de gasteiztarras que desde un principio hemos considerado este contrato muy perjudicial para los intereses de la ciudad”, remarcó el primer edil.
Condena a la que se sumó la portavoz municipal de EH Bildu, Miren Larrion, quien recalcó que “la consecuencia directa” de la sentencia del Tribunal de Cuentas “debe ser la dimisión de Javier Maroto como concejal del Ayuntamiento al que ha perjudicado de forma tan grave”. Larrion censuró que “la dimisión es la única salida del exalcalde”, ya que “quien exigía purgas en su partido contra la corrupción, se llevaran a quien se llevaran, quien exigía la dimisión inmediata de las personas ligadas con asuntos turbios, sólo le queda dimitir tras una condena del Tribunal de Cuentas”. Larrion también exigió la dimisión de Alfonso Alonso, “responsable de la campaña electoral de Rajoy”.
Por su parte, el portavoz del PSE en el Ayuntamiento, Peio López de Munain, instó a Alonso y Maroto a “pedir perdón” por el alquiler de San Antonio, mientras que el diputado de Podemos, Juantxo López de Uralde, solicitó su inhabilitación como candidatos el 26-J. “Éste es el resultado de la brillante gestión económica de la que siempre alardea Maroto, ésta es la ruta social del PP: esquilmar fondos públicos a beneficio de terceros”, afirmó López de Munain, quien defendió que a los representantes populares “no les queda otro remedio que poner el dinero de su bolsillo” y “pedir perdón”. López de Uralde, entretanto, estimó que la condena a los dirigentes populares “debería inhabilitarles como candidatos” a las próximas elecciones generales.
Entretanto, la secretaria general de esta formación en Euskadi, Nagua Alba, dijo que el alquiler de San Antonio demuestra que “la corrupción del PP también está en Euskadi” y que es “muy necesario que (los políticos condenados) estén mucho tiempo lejos de las instituciones”.
Óscar Fernández, desde las filas de Irabazi Gasteiz, también pidió la dimisión tanto de Alonso como de Maroto: “No pueden continuar en la gestión pública. Actuaron contra los intereses de la sociedad”, resumió el edil vitoriano.