Gasteiz - La jornada de hoy puede suponer un paso definitivo para la transformación de la sociedad municipal Ensanche 21, encargada durante quince años de dirigir la expansión de la ciudad y que, si todo sale como está previsto, cambiará radicalmente sus objetivos y su labor diaria. Hoy los consejeros presentan sus aportaciones a los nuevos estatutos de la sociedad, que pasará a convertirse en una empresa rehabilitadora, y también a la propuesta del PSE para que las viviendas de la empresa pública se destinen al alquiler previa reforma por parte de los inquilinos.
Ensanche 21 se amoldará así a los nuevos tiempos de austeridad, prudencia inmobiliaria y contención de las inversiones. El Ayuntamiento quiere crecer hacia adentro, reformar los viejos barrios, habilitar ascensores y mejorar la eficiencia energética de los edificios, y en esa tareaplantea que Ensanche asuma la concesión de subvenciones a la rehabilitación, gestione el patrimonio municipal de suelo y los realojos de aquellas familias que tengan que dejar su casa para renovarla, y a la vez reordene su vasto patrimonio, valorado en más de cien millones de euros, para tratar de colocar en el mercado el mayor número posible de inmuebles.
La propia empresa verá modificada de forma radical su estructura. El PNV quiere igualar las condiciones de los trabajadores de Ensanche 21 a las de los trabajadores municipales, mediante la firma de un convenio, para recortar los 1,75 millones que gasta la sociedad cada año en salarios. Además, se reducirá la plantilla de 21 a 16 trabajadores, más el gerente. A dos empleados se les propondrá la jubilación y a cinco el traslado al Ayuntamiento o a otras empresas municipales. - T.D.