vitoria - Los alrededores del supermercado de Mercadona de Olarizu no han vuelto a ser lo mismo desde que la firma valenciana abriera sus puertas en octubre del pasado año. El que fuera su tercer establecimiento de Vitoria, ubicado en la calle Heraclio Fournier, atrae a un sinfín de clientes, pero lo que es bueno para Mercadona se ha convertido en un problema para los vecinos de Mendiola.

Los residentes en este concejo de Vitoria describen continuas situaciones de “auténtico peligro” por culpa del ingente goteo de coches que aparcan en doble fila frente al supermercado. Aunque éste dispone de su propio aparcamiento, muchos -imprudentes- clientes se lanzan a aparcar fuera, generando situaciones de caos vial y poniendo en peligro la integridad de los conductores que circulan por la carretera local A-2130.

La situación ha llegado a tal extremo que el grupo municipal de EH Bildu solicitó ayer el Ayuntamiento que tome medidas urgentes para paliar estos contratiempos, que los vecinos describen a la perfección en una carta, acostumbrados a contemplarlos día sí y día también. Por un lado, las dobles filas en la A-2130 dirección Puente Alto “provocan retenciones y la necesidad de peligrosos adelantamientos en una carretera que es salida y entrada de Vitoria”, explican.

Pero el problema no son sólo las dobles filas, pues los coches que aparcan bien fuera del Mercadona “efectúan maniobras para girar 180 grados” a la hora de reincorporarse a la circulación, lo que “provoca graves riesgos a los conductores que se acercan a Gasteiz desde Puente Alto”. Por último, en Mendiola han comprobado cómo los vehículos que aparcan en la A-2130 “en sentido contrario a la circulación, mirando a Vitoria”, también invaden el carril hacia Puente Alto cuando se incorporan.

En esencia, la cuestión es que, con la llegada de Mercadona y su ingente afluencia de público, lo que es “más bien una carretera local por la que transitamos cientos de vecinos de Mendiola” se ha convertido “en una calle más”, pero sin la señalización y las restricciones oportunas. Así las cosas, en Mendiola creen que las soluciones “son sencillas”. Primero, y más evidente, “impedir el estacionamiento en doble fila desde la rotonda de Esmaltaciones hasta Puente Alto, pintando la misma línea roja que en otras zonas de Vitoria”, y segundo “pintar una línea continua en el centro de la calzada” para que los coches bien aparcados no den giros de 180 grados ni provoquen peligro al incorporarse a la circulación”. Una reclamación, compartida por EH Bildu, que en palabras del concejal Antxon Belakortu, “es fruto de las políticas absolutamente erróneas de desarrollo urbanístico y comercial de Gasteiz”.