gasteiz - A partir del próximo verano, a los bares más cercanos a la estación de autobuses les va a salir un fuerte competidor. De momento la cafetería y el restaurante construidos en la terminal no han sido adjudicados a nadie, el concurso quedó desierto porque el Ayuntamiento de Vitoria pedía demasiado dinero en forma de canon, pero el concurso se va a repetir y se espera que en unos pocos meses los bocadillos y los cafés se puedan tomar junto a las dársenas.

En un principio, el pliego de condiciones del concurso establecía el pago de 46.200 euros al año por el bar y restaurante de la estación, y de 6.120 por la tienda, más las obras de acondicionamiento de los locales donde se ubicarán estos establecimientos. Visto que nadie creía poder hacer negocio bajo esas condiciones, se redactó un nuevo pliego con un alquiler más razonable, de 33.800 euros por todo el paquete, y en el caso de las máquinas de venta de bebidas, tabaco y comida se pasa de pedir 180 euros a 116 por cada una. Además, en lugar de forzar al adjudicatario del restaurante a abrir en unos pocos meses, ahora el margen se amplía hasta los siete años, aunque según anunció el propio alcalde de Gasteiz, al menos el bar estará listo para ponerse en marcha en breve. En el próximo verano, concretamente, ubicó Javier Maroto la apertura de los establecimientos.

A Ángel Cantón y José Carlos Amador no les preocupa demasiado. El primero, desde el Galtzagorri, tiene claro que está en condiciones de arreglárselas. “Cada uno lucharemos con nuestras armas, al fin y al cabo esto es un libre mercado y tenemos que competir y hacerlo lo mejor posible, y aquí estamos para atender a la gente lo mejor que sabemos, para ofrecer calidad, buen servicio y precios competitivos”, señala el hostelero, cuyo objetivo es que “la gente esté a gusto y repita en nuestro local”.

José Carlos, por su parte, cree que todos los locales podrán convivir en una plaza por la que pasará mucha gente. “No me preocupa mucho, esto es como los bares y restaurantes de los centros comerciales, siempre se moverá más gente y se repartirá todo más”, afirma el hostelero. - T.D.