El galardón Green Capital 2012 que la UE concedió a Vitoria aupó a la ciudad al primer puesto del ranking de capitales verdes europeas. Un punto de inflexión que llenó de orgullo a los gasteiztarras y, sobre todo, a los técnicos municipales que llevan décadas dando el callo por el medio ambiente y la sostenibilidad en el Ayuntamiento. Un trampolín que Gasteiz tiene que aprovechar de ahora en adelante para no quedarse atrás en políticas de sostenibilidad. Y en ello es en lo que anda el Centro de Estudios Ambientales, el laboratorio green que este año celebra su veinte aniversario echando la vista atrás, pero también mirando adelante para hacer frente a los retos que tiene entre manos. El más inmediato, completar el Anillo Verde y el plan de infraestructuras verdes con el que busca introducir la naturaleza en el casco urbano. La reforma de la Avenida y del Europa ha sido el primer paso. A partir de ahora el foco está en Lakuabizkarra donde se aprovecharán solares ahora vacíos y sin uso para crear nuevas zonas verdes.
La movilidad sostenible es el otro gran reto en el que trabaja el CEA. Tras las peatonalizaciones de calles, la regulación de la bicicleta y la creación de zonas 30 de velocidad reducida para vehículos de motor llega el turno de los escolares. Chavales y jóvenes a los que este organismo medioambiental se ha propuesto educar para que se desplacen por Vitoria andando, en bici o transporte público. Y a largo plazo aún queda mucho por hacer para concienciar a los ciudadanos de que es posible y necesario reducir el consumo de energía, como ya se ha hecho con el agua.
De estos veinte años de políticas medioambientales, la concejala Idoia Garmendia destacó la implicación que el CEA tiene con la ciudadanía. Una población que desde 1995 se vuelca cada vez más en las múltiples actividades que organiza el Centro de Estudios Ambientales. Y como no podía ser menos, para celebrar su 20 cumpleaños ha preparado una potente agenda primaveral en Ataria de talleres, exposiciones, conferencias, visitas y concursos.