- Al inicio del debate presupuestario en las Juntas Generales de Álava y tras su reunión con el diputado general, el PSE ha decidido iniciar una ronda de contactos con el resto de grupos para plantear “que las Cuentas las elaboremos desde la oposición, de la misma manera que ya hemos elaborado otras muchas propuestas en esta legislatura”. En ese contexto, el objetivo de los socialistas es, según explicó su portavoz Cristina González, llevar a cabo un debate que avance “en medidas concretas de creación de empleo a través del impulso de las diferentes políticas forales y del aumento de la recaudación fiscal, y que impulse las potencialidades de Álava como territorio moderno y progresista”.

Dentro de esa ronda de contactos, el PSE quiere compartir la visión de un gobierno foral a remolque, falto de ideas y liderazgo y abandonado al letargo del final de la legislatura. Un gobierno “que no ha cumplido sus promesas electorales y que no ha sabido dar una respuesta a las personas que han perdido su nivel de vida, a las empresas que han visto reducida su cartera de pedidos o directamente han cerrado, a los autónomos, a los nuevos proyectos para crear nuevas oportunidades de empleo y, sobre todo, a los jóvenes y a los trabajadores que cada vez encuentran más obstáculos y precariedad en el empleo y en su derecho a desarrollar un proyecto de vida en Álava”. Un gobierno que “no ha sabido dar respuesta a los agricultores y ganaderos que se ven amenazados por la nueva PAC y que han visto disminuidas las ayudas públicas”.

Frente a ese escenario, el PSE propone, para empezar, una agenda social para recuperar y aumentar las ayudas al servicio a domicilio, para ampliar las prestaciones del asistente personal, y la creación de un fondo extraordinario para apoyar, junto con otras instituciones, a las nuevas necesidades de muchos ciudadanos con dificultades para hacer frente a los recibos de la luz, calefacción y agua, un fondo que haga frente a la pobreza energética. También apuesta por una agenda por el empleo público y privado para aumentar, a través de OPE, el número de inspectores fiscales y eliminar la interinidad en el Instituto Foral de Bienestar Social, así como incrementar los recursos del departamento de Promoción Económica para ampliar las ayudas y la cuantía de los avales para que ningún proyecto viable se quede sin financiación.

Los socialistas abogan igualmente por una agenda de inversiones públicas centrada en grandes proyectos con financiación comprometida para varios años, como la recuperación del Parque de Lamuza de Llodio y en otros más pequeños que repercutan en los ayuntamientos con la posibilidad de incrementar los recursos presupuestarios de la convocatoria de obras menores. Asimismo, apuesta por la defensa de las asociaciones que conlleve una nueva relación no sujeta al clientelismo sino a garantizar la autonomía y la continuidad de su trabajo durante todo el año en el ámbito del deporte, de atención a personas mayores y con dificultades, de apoyo a personas con patologías o a la cultura y de conservación del patrimonio.

Junto a estas líneas de trabajo, reflexión y acuerdo, el PSE también considera necesario cubrir “las carencias y el desinterés del PP” por proyectos estratégicos. “Exigimos al Gobierno Vasco, al Gobierno de Madrid y al Gobierno foral inversiones para recuperar el proyecto VIAP, el H24 del aeropuerto de Foronda y otros servicios perdidos como el Puesto de Inspección Fronteriza, para convertir a Foronda en la plataforma logística del norte de España. Apostamos por las energías renovables, exigiendo la eliminación de normas legales que castigan el autoconsumo y su implantación. Y apostamos por la modernización de nuestras plataformas logísticas y el atractivo de nuestros polígonos industriales, al igual que la depuración del Alto Nervión”, subrayó González.

Los socialistas dejan la mano abierta a que el Gobierno de Javier de Andrés pueda apoyar las premisas, pero dudan de que lo haga “porque sus objetivos son radicalmente distintos”, así que no cuentan con que, por su parte, pueda haber acuerdo. Por contra, la secretaria general del PP vasco, Nerea Llanos, aseguró ayer que tanto la Diputación como el Ayuntamiento de Vitoria tienen “voluntad” de lograr unos presupuestos “con el mayor consenso posible”. Ahora bien, en esta misma línea, consideró que el lehendakari también debería “empeñarse” en que las Cuentas vascas no tengan un “consenso limitado”. Por eso, deseó que el debate no sea “un teatrillo político”, con “una foto” entre PNV y el PSE, “basado más en un interés partidista que en el de todos los vascos”. - DNA

Última baza La única carta que le queda por jugar al Gobierno de Javier de Andrés es la búsqueda de un acuerdo con el PNV, pero esa oportunidad no parece demasiado sólida. Hace dos días, el portavoz jeltzale en las Juntas, Ramiro González, aseguró que, si bien no cierra la puerta a reeditar el pacto presupuestario del pasado curso, el apretón de manos está actualmente más lejos que cerca debido a la falta de ejecución del plan de empleo pactado para 2014 y la exigua ejecución de determinadas partidas.