eN Vitoria el sector de la hostelería llevaba ya demasiado tiempo fragmentado. La disolución de la principal asociación, actualmente en concurso de acreedores, dejó a la capital alavesa huérfana de un colectivo que aglutinará a un amplio número de miembros. Aunque Ashovi, que agrupa también a empresarios de hostelería, ha mantenido viva la actividad asociativa en la ciudad, no eran pocas las voces que solicitaban la puesta en marcha de un grupo de hosteleros fuerte, capaz de aglutinar tanto a los principales profesionales de la ciudad como a los pequeños empresarios para trabajar de forma conjunta por el sector. Así, tras varios meses de conversaciones, Vitoria contará desde mañana con una nueva asociación: SEA Hostelería. Bajo el auspicio del colectivo de empresarios alaveses, más de cincuenta hoteles, restaurantes, bares, cafeterías y pubs gasteiztarras se unirán inicialmente para intentar algo que empezaba a parecer imposible: luchar unidos en beneficio de su sector.
Mañana, a partir de las 17.30 horas, las oficinas del SEA acogerán la asamblea general en la que se dará luz verde a este recién nacido colectivo. Un acto al que cualquier profesional hostelero de Vitoria podrá acudir para conocer de primera mano la iniciativa y unirse si lo considera oportuno. Para convertirse en asociado será necesario también hacerse socio del propio SEA, que ha ejercido de maestro de ceremonias para impulsar la unión hostelera en Vitoria. Un soplo de aire fresco que parece haber traído la ilusión a gran parte de los profesionales de la ciudad en un momento en el que opta a convertirse en capital nacional de la gastronomía, cuyo fallo se conocerá el próximo martes.
Aunque la posibilidad de optar a esta galardón ha acelerado un poco los trámites, los impulsores de SEA Hostelería quieren que su asociación vaya más allá de las acciones que podrían realizar de consumarse este nombramiento para Vitoria. Cansados, y lastrados, por la inexistencia de una organización gremial fuerte, los hosteleros confían en que esta vez sea la vencida. "Esperemos que ahora, canalizando esta nueva asociación a través de SEA, el sector se una y podamos empezar a hacer cosas diferentes", explica Jesús Sanz, gerente del restaurante Conde de Álava.
Por ahora son cerca de cincuenta los empresarios vitorianos del sector que han mostrado su deseo de adherirse a SEA Hostelería, aunque sus creadores esperan que la cifra aumente de forma paulatina a partir de mañana, una vez quede formalizado el colectivo, separado a su vez en cuatro sectores: restaurantes y cafeterías, pubs, bares y discotecas. "Necesitábamos a alguien que nos represente a todos los niveles. No puede ser que ahora mismo se estén produciendo reuniones a nivel estatal entre distintas asociaciones y Álava no esté representada", lamenta Mikel Bilbao, propietario del Asador Matxete. Precisamente esta falta de representatividad a la que aluden desde el Matxete es uno de los principales muelles que han impulsado la gestación de SEA Hostelería, en la que también estarán presentes la mayor parte de los hoteles gasteiztarras.
"Creo que es fundamental que haya una voz común para hablar en nuestro nombre con las instituciones o los sindicatos", agradece Asier Aguirre, director del Hotel Boulevard, antes de hacer referencia a la desaparición de la anterior asociación hostelera, ahora en suspensión de pagos. "Yo he vivido en ciudades como Valencia o Bilbao y, por mucho que en otros sitios las asociaciones de hosteleros tengan sus problemas, no había visto nunca que se acabe disolviendo un colectivo tan grande", apunta Aguirre, que asiste esperanzado a esta particular resurrección de los profesionales alaveses del sector. "La gente está ansiosa por tomar la iniciativa. En Vitoria todos éramos conscientes de que hacía falta una asociación como ésta, que nos permita tener nuestro punto de vista, y hacerlo a través del SEA nos parecía una opción seria", subraya por su parte Josean Merino, de los restaurantes MarmitaCo y PerretxiCo.
"Durante los últimos años se veía venir la desaparición de la anterior asociación, con la que hemos tenido una mala experiencia porque no era del todo democrática. Queremos que esta nueva agrupación sea limpia, transparente y más espontánea. Ahora la vemos con mucha ilusión, aunque dentro de un año pregúntame de nuevo y ya te diré", ironiza Mikel Bilbao, del Matxete, que anima a sus compañeros de profesión de toda la ciudad a sumar fuerzas de cara a un futuro en el que la posibilidad de ser Capital Gastronómica abre las puertas a un ilusionante 2014. "Evidentemente el recorrido de la asociación va a ser mucho más largo, pero la opción de optar al premio ha sido y va a ser buena para nuestra propia organización", sostiene Mikel.
trabajar día a día Mañana por la tarde, SEA Hostelería quedará oficialmente constituida en una asamblea en la que también se designará al presidente y el resto de cargos de los futura junta directiva. A partir de entonces quedará el principal reto al que todos sus miembros deberán enfrentarse: trabajar unidos en beneficio de Vitoria. De conseguirlo, el premio a la capitalidad gastronómica nacional pasaría al primer puesto de su lista de prioridades si el próximo martes la otrora Green Capital recibe el galardón a cambio de los 125.000 euros que cuesta el canon. Una pugna en la que competirá con Huesca, Valencia y la localidad catalana de Sant Carles de la Rápita.
Será el primer paso, pero ni mucho menos el último, hacia la ansiada atomización del sector hostelero gasteiztarra. "Lo importante va a ser el día a día, que la gente entienda que asociarse va a ser bueno para todos y que no es de recibo que Álava siga quedándose al margen en muchos ámbitos por no contar con una asociación fuerte", incide Jesús Sanz desde el Conde de Álava.
A priori, uno de los principales escollos con los que este colectivo puede toparse es la necesidad de que cada profesional tenga que asociarse primero a SEA, lo que conlleva un coste económico, para poder formar parte de la agrupación hostelera creada a su amparo. Algo que podría echar para atrás a los establecimientos más pequeños, como bares o cafeterías. También resta por saber qué decisión tomará la que hasta hoy era la única asociación de empresarios de hostelería de Álava, Ashovi, con Pedro Castellanos a la cabeza, que podría seguir funcionando como hasta ahora o pasar a integrarse en SEA Hostelería, formando así una única agrupación alavesa.
De cualquier forma, parece que, por fin, y olvidando experiencias pasadas que no han culminado como debieran, los hosteleros alaveses están dispuestos a unificar criterios y trabajar conjuntamente, con una sola voz, en pos de actividades e iniciativas novedosas que traigan consigo un denominador común: que vecinos y turistas se acerquen a sus establecimientos. Será bueno para ellos. Será bueno para Vitoria.