Vitoria. Hace ahora un año, Arabako Bertsolari Elkartea alzó su voz contra el gobierno de Javier Maroto por los recortes anunciados en cultura y euskera. "El alcalde ha dicho que el euskara no se toca, pero en nuestro caso miente". Ya sabían que con la prórroga se iba a eliminar el convenio que mantenían desde hace cuatro años. De 50.000 a 0 euros. Anunciaron que no se iban a quedar callados y así lo hicieron: un manifiesto, adhesiones de otros colectivos... Y, al final, lograron recursos.

La situación es bien distinta doce meses después, ya que los presupuestos pactados por PP y PNV para este año devuelven la partida de 50.000 euros al colectivo. Mantener los programas destinados a fomentar la lengua vasca fue una de las exigencias de los nacionalistas de Gorka Urtaran durante la negociación, y de ello se sienten "satisfechos". El impulso al euskera se traduce este ejercicio en un montante de 1,1 millones de euros, un 28,4% más que lo ejecutado en 2012, con el Presupuesto prorrogado, explica el portavoz jeltzale.

Además de la ayuda a los bertsolaris, Vitoria recupera el espacio perdido. Un ejemplo, las ayudas para los cursos de euskara para padres y madres, que estaban en la cuerda floja -ahora se prevé una fuerte subida de la matrícula-. Se trata de clases de aprendizaje, cada vez con más adeptos, a las que aitas y amas que no conocen el idioma asisten para después en casa poder comunicarse con sus hijos, matriculados en la ikastola y a los que de esta forma pueden ayudar a hacer los deberes después de clase. Conocimientos básicos en principio a los que incluso se han apuntado abuelos. El programa está dotado este año con 38.500 euros. También se reserva dinero para los ciudadanos que acuden a un euskaltegi a alfabetizarse en lengua vasca y becas para el personal municipal.

El Plan de Euskera es la principal herramienta que el Ayuntamiento tiene para potenciar su normalización y uso. Año a año se trabaja en él con campañas destinadas bien a la población en general bien a colectivos concretos -caso de los comerciantes, por ejemplo- para que a su vez desde el mostrador de su establecimiento lo utilicen con los clientes. Porque el objetivo final es no sólo que el idioma se aprenda sino que se escuche en la calle, bares, parques, centros de trabajo, instituciones, autobuses... En este sentido, una de las partidas va a la Cámara de Comercio y otra a la Federación de Comercio.

Ciudad bilingüe, ciudad más culta Al igual que ocurre con los colectivos y asociaciones culturales, sociales o vecinales de Gasteiz, los euskaltzales también se han visto en la cuerda floja por los recortes anunciados el pasado año a cuenta de la crisis y la mala situación económica de las arcas municipales. Ahora recuperan convenios que creían desaparecidos, aunque aseguran que tampoco es para echar campanas al vuelo, que simplemente se ha regresado a los niveles de 2011. Entre los que mantendrán sus programas están Geu, Euskaltzaindia, las asociaciones Tinko y Euskharan y la ya citada Arabako Bertzozale Elkartea. El Ayuntamiento también reserva dinero para la Korrika -carrera en favor del euskera- y el impulso a la música en este idioma, entre otras actuaciones.

Con esta aportación al Presupuesto, el portavoz del PNV considera que queda demostrado que el fomento del euskera es "uno de los ejes troncales de nuestra estrategia municipal, porque potenciar su uso y conocimiento nos hace una sociedad más culta y, al fin y al cabo, más sostenible", apunta. Pero como nunca llueve a gusto de todos, sabe que hay colectivos a los que no les parecerá suficiente; otros, en cambio, "ya nos han mostrado su satisfacción".