Vitoria. Dotar a los pueblos de Vitoria de un servicio de transporte a la carta por el coste de un viaje en urbano es posible. La asociación pamplonesa Teletaxi San Fermín fue la primera en el Estado en ofrecer este sistema y lleva ya cuatro años. Por eso, era cuestión de tiempo que el gremio alavés se inspirara en sus compañeros del territorio vecino para ofrecer su propia propuesta. Sobre todo, ahora que el gabinete Maroto se plantea fichar a una empresa privada para gestionar un plan piloto. La experiencia navarra deja claro que, si se quiere, se puede ofrecer este servicio de forma eficaz, barata y sin necesidad de recurrir a fichajes externos. Además, el gerente de la agrupación iruñarra, Juan Luis García, asegura que aquí "es todavía más fácil" organizarlo porque los 63 concejos dependen administrativamente del mismo Consistorio. El de Gasteiz.
A bordo de su taxi, en un receso de cinco minutos, García explica a este periódico el funcionamiento del sistema para que los concejos de Vitoria pueden empezar a hacerse a la idea de los entresijos -aún sin desvelar- de la propuesta del gremio alavés. En la comarca de Pamplona, hay rutas a tres valles -en torno a diez pueblos cada uno- con entre seis y diez horarios fijos de ida y vuelta establecidos en función del perfil demográfico de las distintas zonas.
Los trayectos tienen como destino las localidades de cabecera de cada valle, si allí se encuentran los servicios básicos, o el centro mismo de la capital navarra. Y el precio por ruta oscila entre 60 céntimos y 1 euro. Eso sí, el servicio es a demanda, por lo que los taxistas sólo cubren los trayectos en caso de recibir, como mínimo, una llamada. Además, a diferencia del taxi ordinario, se recoge a los usuarios siempre en el mismo punto del pueblo. Como un autobús urbano.
García pone un ejemplo de la efectividad del sistema. "En el valle de Aranguren, el primer servicio se fijó a las 7.30 horas para llevar a las personas mayores que son enfermas crónicas a Mutilva, para que puedan recoger sus recetas, hacerse extracciones de sangre... Y la vuelta la tienen a las 8.30 horas". Además, cuando llega el verano, las frecuencias aumentan para que los vecinos puedan entretenerse en la ciudad. ¿Todo ventajas? Eso parece. "Los usuarios tienen una sensación de transporte increíble y la Administración no incurre en un gasto tan desmedido como suponen los urbanos", asegura el gerente de Teletaxi San Fermín.
Los números lo demuestran. La comarca de Pamplona llegó a gastarse 60.000 euros al año por unas pocas rutas regulares con transporte público al uso. El servicio de taxis a demanda le sale por 15.000. "Y ofrecemos más frecuencias con un confort que no tiene comparación", explica García. Por eso, está convencido de que en Vitoria, si hay voluntad política, los concejos podrán contar con una solución a sus eternos problemas de movilidad. "Allí es mucho más fácil", reitera este taxista, quien no duda en presumir de la valentía de su asociación por haber impulsado esta fórmula para la comarca pamplonesa. "Salió de nosotros, no de la Administración. Y fuimos atrevidos, no había ningún otro modelo así en el Estado". Cuatro años después ya está previsto incorporar rutas a otros tres valles, y en estudio dos más. Por eso, la Europen Green Capital ya no tiene excusas para obviar el camino marcado.