vitoria. Las palabras vuelan, pero los documentos quedan. Así que basta un vistazo a las Cuentas que han regido este año para comprobar que la intención del equipo de gobierno era inaugurar el futuro centro cívico de Salburua en 2013 y el de Zabalgana en 2014. Y basta con repasar el nuevo proyecto presupuestario para descubrir que la inauguración de ambas instalaciones se ha retrasado hasta 2015. Los grupos de la oposición que no han participado en la elaboración de las partidas están convencidos de que es el peaje que hay que pagar por no haber abonado al Gobierno Vasco los ocho millones de euros que costó la primera fase del tranvía; dinero que quedó comprometido por el anterior gabinete de Alfonso Alonso pero que el de Lazcoz gastó, según dijo, en acciones de apoyo a pequeñas empresas.

El primer edil, sin embargo, se niega a relacionar ambas circunstancias, así como hablar de retrasos. En su turno de réplica, obvió este asunto, insistió en que los nuevos barrios acabarán teniendo centros cívicos y, por encima de todo, resaltó que "contarán con una dotación mayor que la prevista inicialmente". Una afirmación que es cierta en parte. El centro cívico de Zabalgana, que estaba presupuestado en 12,5 millones de euros, costará de acuerdo con las nuevas Cuentas 14,49. Sin embargo, la inversión en el de Salburua baja de 11 a 9,9. Esto lo dice el documento, porque el alcalde prefirió ensalzar que en los próximos meses empezarán las obras en ambos barrios.

En cualquier caso, la construcción de los centros cívicos está sujeta a deuda y a la venta de suelo, así que el PP y EA se mostraron dubitativos acerca del devenir de ambos equipamientos. Si ya ha habido retrasos, podría ser, explicaron, que las obras aún se alarguen más tiempo.