Es tiempo de impulsar el emprendimiento, pero ¿cuenta Álava con las herramientas necesarias y con la capacidad de innovar y de atraer talento? Emprendimos, emprendemos y emprenderemos, bajo este enunciado se desarrolló ayer la tercera mesa redonda del foro Álava objetivo 2023.
La moderadora y gerente del Parque Tecnológico lo tiene claro. “Álava es tierra de emprendimiento”, afirma Miren Bilbao. Leyre Madariaga ensalza el ecosistema con que cuenta Euskadi en esta materia, con más de cien agentes trabajando en apoyo al emprendimiento; más de 950 empresas emergentes, vivas; más de 350 millones en facturación y más de 1.700 profesionales.
Con todo, reconoce la directora de Transformación Digital y Emprendimiento en el Gobierno Vasco que la realidad es que a día de hoy hay una competencia brutal por el talento y eso significa que no se ha cuidado del todo bien. Aun así, reivindica el potencial de Euskadi como territorio atractivo para asentarlo, con empresas dinámicas y proyectos de futuro. “Para atraer talento, primero hay que generarlo y en Euskadi tenemos apoyo público”, subraya Madariaga. No obstante, detecta una tarea pendiente en la que ahondar: la necesidad de generar cultura emprendedora. “Fuimos emprendedores, pero ahora nos cuesta más emprender porque nos hemos convertido en una sociedad acomodada a la que le cuesta más arriesgar”, reconoce.
Lluis Vicent acaba de aterrizar en Gasteiz como rector de la universidad privada Euneiz y piensa que a nivel universitario, “Euskadi es una gran plaza, por eso os he comprado”, bromea. Apunta el rector que la misión de la universidad es que los alumnos sepan innovar en sus futuros trabajos porque “la innovación cuesta dinero, pero no innovar puede salir más caro; la gente está obligada a innovar; si hacéis lo mismo que toda la vida, nadie os va a pagar”, dice a su alumnado. De hecho, está convencido de que son las universidades nuevas, las que incorporan la innovación las que crecen con más fuerza, las más eficaces. Eso sí, echa en falta Vicent más agilidad por parte de la Administración, cuya regulación siempre va por detrás de la innovación. Le pasó con la primera universidad online que puso en marcha, a la hora de registrarla fue la Administración a inspeccionar dónde estaban las aulas, ironiza.
Atraer y retener talento
A la responsable de Formación y Empleo de SEA Empresas Alavesas le preocupa especialmente cómo atraer talento ante el reto demográfico que se avecina, lo que denomina la gran jubilación. Y es que, gran parte de las personas que hoy trabajan se van a jubilar en tres décadas en Álava; tres de cada cuatro personas ocupadas tienen hoy más de 40 años en Euskadi y esta paulatina pérdida de mano de obra lleva a que faltan 237.000 personas para cubrir el relevo generacional, explica Yoana Arambalza. “La dificultad para atraer talento llevaría a una pérdida del 10% de la población activa y, en consecuencia, a la ralentización y la pérdida de posicionamiento de la economía vasca”, vaticina.
Tal es así que desde 2016, “el 70% de las empresas alavesas confiesa que tiene dificultades para encontrar el personal cualificado que necesitan”, indica Arambalza.