El Instituto vasco de Consumo, Kontsumobide, ha alertado este lunes de que las mascarillas de rejilla o transparentes que se distribuyen en Euskadi solo tienen una filtración bacteriana del 15,3 % cuando la normativa exige que sea como mínimo del 90 %, por lo que va a retirarlas del mercado.

Ante la "incertidumbre" generada por estas mascarillas y "la extensión de su uso", Kontsumobide decidió enviar una muestra a un laboratorio acreditado que ha analizado si los requisitos de respirabilidad y filtración se ajustan a lo marcado en el etiquetado.

Para ello se ha comprobado la Eficiencia de Filtración Bacteriana (BFE) y se ha estudiado la respirabilidad y se ha determinado que estas mascarillas incumplen la parte de filtración, ya que su eficacia es del 15,3 %, muy por debajo 90 % exigido.

Tras comprobar los incumplimientos de la normativa en el etiquetado, Kontsumobide se ha reunido con la empresa fabricante -cuyo nombre no ha precisado-, que "ha mostrado su colaboración en todo momento" y ha decidido retirar el producto de los distribuidores y puntos de venta, ha informado este organismo en una nota.

El pasado día 12 el Ministerio de Consumo publicó la nueva orden con los requisitos de información y comercialización de mascarillas higiénicas, que otorga a las empresas un plazo de 30 días para adaptarse a las nuevas disposiciones.

Una vez se cumpla este plazo de 30 días dará comienzo una campaña de inspección de Kontsumobide sobre el etiquetado de las mascarillas -con carácter sancionador- que incluirá también a las mascarillas transparentes.