Vitoria, 12 may (EFE).- La prohibición por parte de la Ertzaintza de reuniones de hasta diez personas en domicilios ha provocado confusión con las policías locales, en concreto, con la de Vitoria, que ha elevado una consulta al órgano de coordinación policial sobre el COVID-19 para aclarar si se atiene o no a lo recogido por el Boletín Oficial del Estado (BOE).

La polémica ha surgido cuando la Policía local de Vitoria ha colgado en la página web del Ayuntamiento de la ciudad los criterios de interpretación de las acciones permitidas y las que no en la fase 1 de desescalada, en la que el País Vasco ha entrado desde el lunes, aunque con matices aprobadas por el Gobierno Vasco, que la convierten en más restrictiva con respecto a la orden ministerial publicada en el BOE el pasado 9 de mayo.

La guardia urbana de la capital alavesa recoge en este documento que las reuniones de hasta un máximo de diez personas ("familiares, amigos o vecinos") están permitidas siempre que se mantengan las medidas de seguridad e higiene establecidas por las autoridades sanitarias para la prevención del COVD-19, sin especificar el lugar en el que se produzcan.

Fuentes municipales han explicado a Efe que se ciñen a lo recogido en el artículo 7.2 de la orden ministerial recogida en el BOE, en la que se señala que "los grupos deberían ser de un máximo de diez personas, excepto en el caso de personas convivientes" y tampoco se acota ningún lugar en el que no sean posibles, por lo que tal y como entienden las mismas fuentes, también se permiten en los domicilios.

El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco hace una interpretación diferente de lo publicado en el BOE y estima que la prohibición por parte de la Ertzaintza de que estos encuentros se desarrollen en casas no contraviene la orden ministerial porque en ella "no se habla en ningún momento de que se permitan en domicilios".

Para aclarar esta confusión, la Policía local de Vitoria ha elevado una consulta al Eazok, órgano vasco de coordinación policial sobre el COVID-19. Fuentes del Departamento de Seguridad han explicado a Efe que han recibido la consulta y que la respuesta será que las policías locales deben seguir el criterio desarrollado por la Ertzaintza.

Precisamente, también se ha pronunciado este martes sobre este asunto el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, quien ha dicho que la interpretación del citado artículo de la orden ministerial es "controvertida incluso dentro de la Abogacía del Estado", organismo que "no tiene una lectura unánime de esa cuestión". Ha reconocido, además, que este artículo ha suscitado "alguna discrepancia" en el propio Ejecutivo autonómico.

El portavoz ha argumentado que el artículo 7 lleva por título "libertad de circulación" y por tanto sus cuatro apartados se refieren a ella y no a la libertad de concentración, que sería la relativa a las reuniones de personas. "Suponer -ha dicho- el artículo 7.2 se refiere a la libertad de concentración es mucho suponer. Jurídicamente se puede defender pero es una interpretación cuanto menos forzada".