- Nubarrones de tormenta se ciernen sobre la relación entre el PP y Ciudadanos. El torrente de bajas que sufrió el partido naranja en dirección a la formación popular, tras la moción de censura fallida que PSOE y C’s pactaron el pasado marzo en Murcia para desbancar al PP del Ejecutivo regional, se ha reactivado con el fichaje de Luis Gordillo, parlamentario de C’s y excoordinador de esta formación en Euskadi, por el partido que preside Carlos Iturgaiz. Este aseguró ayer que hay “muchísimas personas de Ciudadanos por todo el territorio nacional que están dando el paso” de Gordillo con el fin de “fortalecer, ensanchar y ampliar el centroderecha”, lo cual es “muy gratificante”.

El vicesecretario general de Ciudadanos, Edmundo Bal, trató ayer de taponar esta hemorragia y aseguró que no le consta que haya movimientos desde el PP para atraer a diputados y senadores de su partido a sus filas, tal y como avanzó La Razón. Eso sí, a continuación cargó duramente contra los de Pablo Casado y acusó al PP de estar “equivocando el objetivo” al intentar acabar con C’s en lugar de unirse contra el nacionalismo y el separatismo.

“Es lamentable lo que está haciendo el PP, está equivocando el objetivo, que ahora mismo es que España no la gobiernen los populistas, los separatistas y los nacionalistas”, indicó Bal, que consideró que el problema está “especialmente agudizado” en Euskadi, donde el nacionalismo es “hegemónico”. Insistió en que el PP se está equivocando al poner las siglas de su partido por delante de “las únicas que importan” que son las de Euskadi y España, zanjó.

Edmundo Bal, que también es portavoz estatal de C’s, expuso que en su partido existe “ilusión y un renovado sentimiento de unión” causada, a su entender, por la “opa hostil” que está planteando el PP de manera “sonrojante”. Insistió en que en su grupo parlamentario están “muy enchufados” con sacar adelante su proyecto y demostrar que el espacio liberal “va a triunfar”.

Este nuevo seísmo en el partido que preside Inés Arrimadas tiene su epicentro en Euskadi, donde el salto de uno de los dos parlamentarios naranjas al PP ha puesto en riesgo la continuidad del grupo PP+C’s. El presidente de los populares de la CAV, Carlos Iturgaiz, trató de quitar hierro a esta posibilidad y explicó que el miércoles se puso en contacto con Arrimadas y le trasladó que, “fuese cual fuese” el número de representantes de cada partido, “iba a seguir con esa normalidad, rutina y tranquilidad”. Según él, “lo importante de la coalición, su objetivo, proyecto y programa, que es defender el constitucionalismo, la unidad de España y el Estatuto de Gernika, sigue vigente”.

En Radio Euskadi, recordó el llamamiento del presidente del PP, Pablo Casado, “a aquellos que quieran hacer un centroderecha fuerte”, abriendo las puertas del partido a “los conservadores, a los liberales como Luis Gordillo y a los socialdemócratas”. Dijo que “mucha gente entiende que para ganar a Sánchez y a los nacionalistas en el País Vasco se necesita un centroderecha fuerte y eso hoy se llama PP”.

Moción fallida en Murcia. Sobre la posibilidad de que más cargos de C’s estén preparando su salto al PP, Edmundo Bal dijo ayer que no tiene información de ello pero que “conociendo a la persona que pudiera estar llevando a cabo estos contactos”, se imagina que los estará haciendo con “nocturnidad y alevosía” y no estará comunicándolos. Se refería así, de forma velada, al ex secretario de Organización de Ciudadanos, Fran Hervías, que dio el salto al PP el pasado marzo después del fracaso de la moción de censura en Murcia entre los naranjas y el PSOE para desbancar al PP. Se da por supuesto que Hervías, por su profundo conocimiento de C’s, estaría detrás de muchos de los cambios de chaqueta naranja por la azul entre las dos formaciones.