- El secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, y el director de la CIA, William Burns, se reunieron en Moscú para abordar las relaciones ruso-estadounidenses, informó ayer el órgano adscrito al Kremlin. “El secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, se reunió en Moscú con el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), William Burns”, indicó el portavoz de este órgano consultivo, Evgueni Anoshin, según la agencia Interfax. “Las partes abordaron las relaciones ruso-estadounidenses”, agregó, sin especificar cuándo se produjo el encuentro en la capital rusa.

Se trata, por lo que ha trascendido públicamente, de la primera cita entre Pátrushev y Burns, quien fue embajador en Rusia entre 2005 y 2008. En 2013 mantuvieron contactos durante la visita del secretario del Consejo de Seguridad de Rusia a EEUU, pero entonces Burns era subsecretario de Estado.

Pátrushev mantiene contactos regulares con el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, con quien conversó a finales de septiembre sobre las relaciones bilaterales, la estabilidad estratégica y Afganistán.

Además, se vieron en mayo en Ginebra para preparar la primera cumbre un mes después en esa ciudad suiza entre el mandatario ruso, Vladímir Putin, y el presidente de EEUU, Joe Biden.

En ese encuentro, los dos líderes acordaron iniciar un diálogo sobre ciberseguridad y retomar el diálogo sobre estabilidad estratégica y control de armas nucleares, además de eliminar obstáculos al trabajo de sus respectivas embajadas en Washington y Moscú, si bien por ahora hay pocos resultados tangibles.

La intención de ambos era, sin hacerse ilusiones, iniciar un proceso para normalizar las relaciones en aquellos asuntos en los que veían posibilidades de cooperación, en un momento en el que ambos calificaron las relaciones ruso-estadounidenses como las peores desde la Guerra Fría.

En este contexto, la Flota rusa del mar Negro ha efectuado ejercicios para defender a las bases navales de un ataque aéreo enemigo, coincidiendo con la presencia de dos buques de guerra en la zona, informó ayer el Ministerio de Defensa. “Los sistemas antiaéreos a bordo se pusieron en alerta en las bases navales de Crimea y Novorosíisk durante los simulacros”, señaló la Flota del mar Negro.

Los objetivos fueron imitados electrónicamente por los sistemas de control de armas de los barcos, explicó Defensa.