Estancias temporales para mayores, mucho más que un respiro

Las personas en situación de dependencia y las personas cuidadoras también quieren y necesitan romper con la rutina y disfrutar de diferentes formas de vivir. Para eso es imprescindible conocer las diferentes alternativas que se tienen, tanto para la persona dependiente como para la persona cuidadora.

Partiendo de nuestra larga y reconocida experiencia en los cuidados sociosanitarios, desde el grupo IMQ Igurco queremos ofrecer nuestra orientación sobre las estancias temporales que pueden disfrutar las personas mayores y sus familiares con todas las garantías de bienestar y saber hacer.

Las estancias temporales pueden realizarse de forma privada o a través de la Diputación Foral de Álava. En cualquiera de los dos casos, lo correcto es ponerse en contacto con la residencia elegida, preguntar si está inscrita en el Registro Foral de Servicios Sociales del Territorio Histórico de Álava y solicitar que le proporcionen toda la información necesaria para el ingreso.

Si se realiza a través de la Diputación Foral de Álava, existen diferentes ayudas, como por ejemplo “la prestación económica vinculada al servicio residencial temporal para el descanso de las personas cuidadoras de personas perceptoras de la prestación económica para cuidados en el entorno familiar”, regulada en el Decreto Foral 41/2022, del Consejo de Gobierno Foral de 4 de octubre.

El ingreso temporal financiado mediante la prestación económica consistirá en un periodo máximo de hasta 30 días naturales, pudiendo realizarse la estancia en un único periodo o fraccionarse hasta un máximo de dos.

Las estancias temporales o de respiro en residencias de personas mayores pueden proporcionar diversas ventajas. En primer lugar, en IMQ Igurco se realiza una valoración geriátrica integral de todos los aspectos sociosanitarios que atañen a la persona mayor (área clínica, área mental, área funcional y área social). Tras analizar los resultados, el equipo multidisciplinar diseña un tratamiento y un plan de intervención personalizado.

Así, se mejoran las capacidades cognitivas, funcionales y sociales, y, sobre todo, se amplía la interacción social con otras personas usuarias.

Al finalizar la estancia, las residencias de IMQ Igurco hacen entrega de un informe con las principales pautas a seguir en el domicilio, con el fin de mantener al máximo las capacidades de la persona mayor e identificar factores de riesgo en su evolución.

A través de las estancias temporales, la persona cuidadora vuelve a coger energía y conoce un entorno de cuidados que, hasta entonces, puede resultarle desconocido y, al que, sin embargo, pueda recurrir en un futuro con más tranquilidad y conocimiento.