Hace unos meses el anuncio de la ruptura entre Christian Gálvez y Almudena Cid pillaba a todos por sorpresa, y aunque entonces parecía que su separación sería cordial y de mutuo acuerdo, el tiempo ha demostrado que las cosas están siendo muy diferentes entre ellos.
Tras once años de matrimonio, la pareja decidía emprender caminos separados y causaba un gran revuelo por la diferente forma en la que ambos afrontaron la misma situación.
Mientras Almudena Cid se mostraba triste y dolida por lo que había ocurrido, Christian comenzaba una nueva relación y daba una nueva oportunidad al amor con su compañera de trabajo, Patricia Pardo, a la que hace unos días publicaba su amor públicamente y con quién ya pasea de la mano con total naturalidad.
Sin embargo, para la ex gimnasta las cosas son muy diferentes y aún está digiriendo todo lo que ha pasado y no entiende la forma de actuar que su ya exmarido tiene con ella tras tantos años justos.
Actualmente, están viviendo unos días de lo más tensos y es que el último episodio de su separación ha dejado descolocados y molestos tanto a Almudena como a su familia.
ALMUDENA CID NO ENTIENDE LA ACTITUD DE SU EX
Almudena Cid acudió a casa de Christian Gálvez para recoger sus pertenencias y hacer la mudanza. La vasca llegó acompañada de sus padres, pero la situación se volvió bastante incómoda cuando se dieron cuenta de que estaban siendo grabados por las cámaras de seguridad de la casa.
Los miembros de la familia de la ahora actriz no pueden comprender como alguien que fue parte de la familia durante tantos años los trate como a extraños y consideran la actuación del presentador como una provocación.
Por su lado, el entorno de Gálvez asegura que el televisivo tomó esa decisión para evitar nuevos conflictos.
Llegados a este punto, en cualquier momento uno de los entornos de los protagonistas podría empezar a hablar, tal vez de manera pública.
UN DIVORCIO CON SEPARACIÓN DE BIENES
Almudena vio el pasado fin de semana como la obra de teatro en la que había encontrado refugio tras su separación, bajaba definitivamente el telón y quiso dejar un mensaje de agradecimiento en sus redes sociales: "Solo puedo daros las gracias por cada noche compartida sobre el escenario. No solo me siento apoyada, también reforzada y valorada a vuestro lado", escribía la ex gimnasta.
Todo apuntaba a que su divorcio sería fácil y rápido, puesto que contaban con separación de bienes, sin embargo, finalmente habrían llegado a un acuerdo en el que el presentador habría accedido a las peticiones de su ex que solicitó un loft valorado en 225.000 euros; dos plazas de garaje; un coche; una furgoneta y una cantidad no especificada de dinero.
