Rocío Carrasco ya ha abierto los trece contenedores en los que han permanecido todos estos años las pertenencias más personales de su madre, Rocío Jurado, desde su fallecimiento. Y al hacerlo se ha encontrado con cosas que eran propiedad de José Ortega Cano, como una carpeta, capotes y un álbum de fotos e incluso retratos de los hijos de ambos, Gloria Camila y José Fernando.
Según ha anunciado Sálvame, Rocío Carrasco ha decidido este mismo lunes enviar por mensajero esas pertenencias metidas en unas cajas a la casa del extorero para que las tuvieran sus dueños, pero se ha topado con la negativa del cartagenero a recogerlas.
Al mensajero le ha recibido Aniceto, el cuñado de Ortega Cano, que al ver que la remitente era Rocío Carrasco ha ido a consultar con el extorero para aceptarlas o no, y el murciano le ha transmitido que no las quería. La hija mayor de Rocío Jurado ha pensado que podría tratarse de un malentendido o que Ortega Cano hubiera pensado que era una broma y ha telefoneado a Aniceto, que le ha repetido la misma respuesta: no las van a recoger, y si quiere entregarlas deben comunicarse entre sus abogados.
La propia Gloria Camila, que ha revelado que ha llorado al ver el tráiler de la docuserie que ha estrenado Sálvame, en donde se ve a Rocío Carrasco abriendo los contenedores y viendo los retratos de sus hermanos, ha confirmado que el mensajero había llegado con las cajas. “Las cosas han ido a casa de mi padre, yo ya no vivo ahí, han llegado las cajas a la puerta pero no se han recibido”.