madrid - Compañero de instituto de Iker Jiménez y tal para cual en cuestión de ver que puede haber mundos misteriosos que no queremos o no podemos ver. “No, no voy a quitarle el puesto a Iker, somos amigos”, ríe Fernández Bueno. Lo que sí va a permitir al espectador es viajar a la Saqqara, donde los enterramientos egipcios provocan muchas preguntas, o a La isla de las muñecas, un escalofriante punto de destino para encontrarse con el espíritu de una niña ahogada hace 60 años. También invitará a visitar los espectros de la ciudad antigua de Edimburgo o a ver qué hubo en San Sebastián de Garabandal antes de las apariciones de la virgen del Carmen en la década de los 60. La cita con un mundo de luces y sombras es el martes en DMAX y Lorenzo Fernández Bueno es el anfitrión que abre la puerta de muchos misterios.

¿Cuál es la clave de ‘Misterios’?

-Es un programa que tiene fuerza y hacemos uso de ella para empezar a hablar de todo aquello que no entendemos. En el primero, mostramos el hallazgo de pinturas rupestres en lo que es la selva de montaña entre Perú y Ecuador. Mostramos imágenes en las que veremos a hombres dando caza a dinosaurios?

¿De cuántos años estamos hablando?

-Para validar estas escenas hemos ido con arqueólogos, queríamos que datasen estas pinturas y que se comprobara que no son un fraude. Nos han dicho que nos podemos remontar a 9.000 u 8.000 años antes de Cristo. Esas escenas podrían romper en mil pedazos lo que nos cuenta la paleontología.

¿Dinosaurios en esa época?

-Somos conscientes de que no pueden serlo y quizá estamos hablando de una involución de estos u de otra cosa, lo dejo ahí.

60.000 kilómetros en pos de misterios, un largo recorrido el suyo.

-Sobre todo si te planteas que este recorrido se ha hecho en apenas tres meses. Hemos viajado a países como Rumanía, Escocia, Bosnia, Egipto, México, Perú y distintos puntos de España. Hemos intentado recorrer aquellos puntos que nosotros consideramos que es misterio.

¿Y qué es el misterio para usted?

-Todo aquello que no tiene respuesta y nos provoca curiosidad. Misterio es aventura, mito, exploración, historia, fenómenos extraños, fenómeno ovni? En resumen, es todo lo que nos provoca curiosidad. Por eso hemos intentado que en cada capítulo vayan cuatro temas diferentes.

¿Le ha sorprendido algún misterio más que otro?

-Quedarse con uno es difícil, pero podría decir dos: uno de ellos es el Serapeum de Saqqara, una necrópolis a unos 50 kilómetros de El Cairo. Estamos hablando de tumbas gigantescas, cada sarcófago pesa con tapa unas 100 toneladas y están metidos en un lugar del desierto donde plantearse un desplazamiento es impensable?

¿A quién enterraban en esos sarcófagos?

-Esa es la pregunta porque los sarcófagos están vacíos. Hemos acudido al mito y se dice que durante 6.000 años, antes de la época dinástica, reinó en la zona una suerte de semidioses, se dice que eran gigantes.

Hablaba de otro misterio que le ha extrañado.

-La isla de las muñecas en Xochimilco en México. Imagínate, una isla llena de vegetación y con más de 3.000 muñecas colgadas de las ramas, de una cabaña? Todo para protegerse del espíritu de una niña que se ahogó en una laguna cercana hace 60 años. Si lo visualizas?

Es muy inquietante, ¿no?

-No te haces una idea, sobre todo porque la persona que puso esas muñecas como amuletos, Julián Santana, falleció hace once años y se dice que estas muñecas le hablaban y le arrullaban. Apareció ahogado en el mismo lugar donde comienza esta historia y lo más inquietante, rodeado de muñecas.

Entre sus misterios, el vudú. Una práctica que no nos tomamos en serio y sobre la que frivolizamos mucho.

-El vudú lo hemos metido como parte de una crítica social. Hemos entrevistado a Antonio Salas, el célebre infiltrado. Lo que está ocurriendo con esta práctica es terrible, las redes de trata de prostitución en España someten a las prostitutas desde su país de origen con rituales de vudú para que no se les escapen?

¿Es efectivo?

-En teoría no, salvo que creas en él, pero también es fácil creer en él. Dada la procedencia de parte de las mujeres sometidas en redes de prostitución, es fácil que estas personas caigan porque creen en el vudú de una forma terrible. Es algo que no debemos tomarnos a risa, más que nada porque estamos en el siglo XXI y parece que todos estamos pendientes de Twitter o Instagram, pero, sin embargo, vemos que estás creencias antiguas, todavía hoy, siguen siendo efectivas, muy amenazantes y terribles.

Si nos relajamos y somos un poco frívolos, también lo necesitamos, todos hemos tenido la tentación de practicar vudú con alguien que nos incordia, ¿usted no?

-Ja, ja, ja? me vas a poner en un brete. Soy muy respetuoso con este tipo de creencias y parto de la idea de que el principio casi alquímico que dice que tal y cómo tú te portes con los demás vas a recibir el comportamiento de otros, lo tengo muy asumido.

Vamos, que el karma siempre vuelve.

-Creo que sí. El hombre del pasado no era estúpido y hablaba del karma, la transmigración de las almas, las energías sutiles que se movían? Creo que realmente algo manejaban o había gente que tenía una sensibilidad especial y era capaz de captar esas energías, esos movimientos. Así que pienso que sí, que el karma siempre vuelve.

¿Es usted crédulo y se deja llevar por esas apariciones de la virgen en Cantabria, las muñecas que susurran y demás fenómenos que casi parecen efectos especiales de una película?

-Soy escéptico, creo que hay que serlo, pero dentro de mi escepticismo, como periodista que soy y como persona a la que le gustan estas temáticas, voy a buscar respuestas a los sitios donde dicen que ocurren estas cosas.

A veces es difícil hacer ejercicios de fe con determinadas creencias.

-Yo no te lo voy a pedir, tampoco a los espectadores, voy a mostrar la documentación que avalan que esas historias que se cuentan pueden tener algo de realidad.

¿Y de fraude?

-Cuando te metes en este mundo, te das cuenta de que hay un 80% en lo que se cuenta que corresponde a fraudes inconscientes, fantasías o creencias; pero hay un porcentaje, que por pequeño que sea, crea el misterio y no se puede explicar. Es en ese porcentaje donde nos debemos de mover.

¿Apariciones marianas o alucinaciones?

-Estás haciendo alusión a Garabandal (Cantabria), si yo te digo que antes de 1961, miles de años antes, en la misma montaña donde supuestamente se aparece la virgen, el hombre del calcolítico observa algo similar y lo refleja en el arte rupestre que hay en las cuevas cercanas, que incluso lo sacraliza colocando un menhir donde llevaba a cabo sus ritos.

¿Cuál es la posible respuesta ante esto?

-Que en estos lugares, en San Sebastián de Garabandal y en otros, ocurrió algo que pueden captar determinadas personas y que dependiendo del entorno socio cultural, sobre todo religioso, en el que se muevan, esto que ocurre se interpreta de una forma y otra.

¿Le salieron muchos espectros en la ciudad antigua de Edimburgo?

-Me hubiera encantado. Más que espectros y almas penitentes, lo que tiene este lugar es encanto. Solamente pensar que debajo de la ciudad actual hay otra que se mantiene intacta, igual que como estaba en el siglo de la peste, es apasionante. Es Escocia, hubo muchas muertes por las epidemias, pero es un país en el que hay muchas leyendas de aparecidos.

Nada creíble, ¿o sí?

-Quizá ahí nos movemos en el entorno de las leyendas, pero son tan deliciosas que merece la pena contarlas.