Lavarse bien el pelo y usar productos específicos para su cuidado, cortarlo varias veces al año, desenredarlo frecuentemente y usar acondicionador es fundamental para que luzca sano, brillante y fuerte.

Solo un 20% de los españoles reconoce que usa mascarilla una o dos veces por semana, pese a que el 75% asegura que se preocupa por el cuidado del cabello. Un 60% de las personas reconoce que usa planchas y secadores a diario, lo que hace que el pelo se deshidrate y aparezca apagado y sin vida. El uso frecuente de mascarillas le hará recuperar la hidratación y el brillo, según apuntan expertos de nutritienda.com.

Pero, ¿qué es una mascarilla? Es un tratamiento capilar rico en ingredientes hidratantes, como aceites o mantecas, que se usan después del lavado y que proporcionan diferentes resultados según su formulación: fortalecen las raíces del pelo y le dan brillo a la vez que lo hidratan.

Diez beneficios del uso de mascarillas

1- Aportan luminosidad y brillo

2- Nutrición e hidratación más profunda.

3- Protege el cabello de los daños ocasionados por los tintes

4- Protege de la exposición solar

5- Facilitan el peinado

6- Mantienen el color

7- Regulan la grasa

8- Estimulan la reparación y evitan las puntas abiertas

9- Controlan el encrespamiento

10- Previenen la caída y fomentan su crecimiento reforzando el riego capilar

Cómo aplicar el producto

La aplicación de las mascarillas es bastante sencilla. Lavamos el pelo con champú. Retiramos el exceso de agua con una toalla y desenredamos y peinamos antes de usar el producto con el cabello aún húmedo. Lo separamos por partes y aplicamos la mascarilla desde los medios hasta las puntas con un masaje para que los nutrientes penetren bien.

La dejamos actuar entre 5 y 15 minutos con el cabello envuelto en una toalla tibia. La retiramos con abundante agua templada y después fría para que la cutícula se cierre y se favorezca la circulación sanguínea.

Cinco mascarillas caseras según tu tipo de pelo

Hay muchos tipos de mascarillas que se pueden comprar y que son perfectas para distintos tipos de cabello pero, los expertos de nutritienda.com, proponen cinco tipos de mascarillas que puedes hacer tú misma en casa.

1- Cabello débil: mascarilla de aloe vera y aceite de romero. Mezcla jugo de aloe vera con tres gotas aceite de romero y una yema de huevo batido, aplica y deja actuar durante media hora. El aloe vera tiene muchas vitaminas, minerales y aminoácidos que lo convierten en un sérum anticaida perfecto que fortalece la fibra capilar e hidrata sin engrasar. El aceite de romero previente la caída del cabello, estimula el metabolismo celular y aporta nutrición extra. La biotina del huevo estimula el crecimiento del cabello.

2- Cabello seco: mascarilla de aguacate y agua de coco. Mezcla un aguacate, dos cucharadas de aceite de coco y dos de aceite de oliva, caliéntala ligeramente, déjala actuar media hora y retírala. El aguacate protege el cabello, lo hidrata en profundidad y controla el encrespamiento. Los aceites hidratan y reparan el cabello dañado.

3- Cabello graso: mascarilla de limón y huevo. Se mezcla un chorrito de limón con otro de agua, una pizca de sal y dos huevos. Se deja actuar media hora y se retira. El limón regula la grasa, proporciona brillo y permite que el cabello dure más tiempo limpio. El huevo regula la grasa, combate las bacterias y ayuda a hidratar el pelo sin engrasar.

4- Cabello sin volumen: mascarilla de plátano y aceite de menta piperita. Mezcla un plátano maduro con diez gotas de aceite de menta piperita. Se puede aligerar con aceite de coco, leche o agua. Se deja actuar durante veinte minutos. El plátano tiene mucho zinc que aporta brillo y da al cabello un aspecto sano gracias a las vitaminas E, A o C. El aceite de menta piperita también da volumen al cabello al estimular el cuero cabelludo y por sus propiedades calmantes y antiinflamatorias.

5- Para todo tipo de cabellos: mascarilla de levadura de cerveza y aceite de almendras. Se mezclan cinco cucharadas de copos de levadura de cerveza en un poco de agua y dos cucharadas de aceite de almendras. Se deja actuar una hora. La levadura de cerveza fortalece el pelo y el aceite de almedras nutre en profundidad y proporciona brillo y suavidad al cabello.