- Todo puede pasar en las elecciones de este domingo en Portugal, donde los sondeos anticipan una reñida disputa en las urnas entre los socialistas y los conservadores, que se abrieron ayer a negociar un “pacto de caballeros” para garantizar la gobernabilidad si no se consigue formar gabinete. Después de que los socialistas de António Costa liderasen todas las encuestas en los últimos meses, el PSD (centroderecha) ha recortado distancias y esta semana los sondeos llegaron a dar un empate técnico entre ambas formaciones.

Los comicios se antojan más reñidos de lo que parecía y la incertidumbre deja en abierto todos los escenarios posibles, hasta los que surgían como más improbables.

“Si no gano las elecciones, estoy disponible para negociar con quien gane para que Portugal no tenga que ir a elecciones otra vez en poco tiempo y garantizar la gobernabilidad”, señaló este jueves el líder del PSD, Rui Rio. “Espero que sea recíproco”, avisó a los socialistas al margen de un acto en la recta final de la campaña.

Si los números no cuadran ni a izquierda ni a derecha, se plantea la posibilidad de negociar un acuerdo que permita gobernar al partido más votado sin que su rival sea una piedra en el camino.

La oferta a la que ayer respondió Rio llegó de las filas socialistas, de boca del ministro de Exteriores y “número dos” del Gobierno de Costa, Augusto Santos Silva, que apuntó en un debate que los socialistas negociarán con los partidos de izquierda, pero reconoció también otras “soluciones intermedias”.