Roma - El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, recalcó ayer en que el barco Aquarius, de las ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Mediterranée, “no verá nunca un puerto italiano” para desembarcar a los 141 inmigrantes salvados en el mar. El ministro y líder de la ultraderechista Liga subrayó que el barco “es de propiedad de un armador alemán (Jasmund Shipping) y tiene bandera de Gibraltar”. “Esta nave no verá nunca un puerto italiano”, aseguró en la RAI.
El Aquarius, que llegó desde Marsella (Francia) a las aguas internacionales frente a Libia para rescatar inmigrantes, ha salvado en los últimos dos días a 141 personas en dos operaciones distintas. En la primera rescató a 25 inmigrantes, de los que 16 eran hombres y 9 mujeres, una de ellas embarazada, y procedentes de países como Bangladesh, Camerún, Ghana, Costa de Marfil, Nigeria o Senegal. En la segunda operación recogió a 116 inmigrantes que viajaban en una barcaza: 78 eran varones, 38 mujeres, una de ellas encinta, y entre ellos había 67 menores no acompañados. Los inmigrantes de esta segunda embarcación procedían de Eritrea, Somalia, Marruecos y Egipto. “Si no hubiéramos estado ahí, esas personas podrían haberse ahogado”, lamentó MSF. - Efe