Nadie pone en duda que Silvia Intxaurrondo es una de las periodistas de moda, tanto por su estilo incisivo y riguroso como por las audiencias que está cosechando en La Hora de La 1. Se ha convertido en la reina de las mañanas, adelantando a Ana Rosa Quintana y Susanna Griso y se ha convertido en uno de los blancos de la derecha, que no esconde que no la quiere en RTVE si llega al poder.

Entrevistas incómodas

La periodista vizcaína ya se hizo viral durante la pandemia por unas incómodas (y necesarias) preguntas que realizó en Telemadrid a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y que desembocaron en su salida de esa televisión autonómica poco después.

Pero su popularidad creció aún más cuando entrevistó al presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, durante la campaña de las elecciones generales de 2023.

En aquella entrevista, que algunos consideran que fue un punto de inflexión para que el líder del PP no alcanzara la Moncloa, Intxaurrondo rebatió unos datos que afirmó Feijóo, dejando claro que el PP no había revalorizado siempre las pensiones como había asegurado el gallego. Él respondió que se vería obligada a rectificar sus datos, pero ella se mostró muy segura (tenía razón), con lo que dejó en mal lugar al candidato conservador.

Rebate a Feijóo y recibe un mensaje

Dos años después, la periodista fue invitada este miércoles al estreno de la segunda temporada de En Primicia, el programa que presenta Lara Siscar en La 2, y recordó aquel momento. “Cuando un entrevistado se te planta y te dice no sólo que tus datos no son correctos sino que vas a tener que rectificar hay gente que o duda de sus datos o dice: ‘cuidado, que lo que me está diciendo es que va a haber una represalia’. Pero es que yo estaba segura de mis datos, yo los había chequeado. Y yo creo que el dato es lo que me dio la entereza para seguir y decir: ‘No, oiga, no: mis datos son correctos. Usted puede decirme lo que le dé la gana, pero yo sé que la verdad está conmigo”, explicaba.

La periodista de Barakaldo aseguraba no haber sido consciente en aquel momento de la repercusión que estaba teniendo lo sucedido. “Sinceramente no. La primera sensación inquietante que pude tener fue durante la misma emisión en directo, porque, a tres minutos de que terminase el programa, un miembro de la alta dirección de TVE me escribe un mensaje que dice: ‘Tranquila’. Siempre recordaré ese mensaje, porque yo hasta las 10.37 no tuve noticia de la que se estaba montando”.

Apoyos y ataques

Además, afirmaba que no todo el mundo la apoyó tras la entrevista. “En TVE había dos opiniones: la de ese mensaje y la que yo me encuentro cuando voy a una reunión minutos después. Me encuentro a mandos intermedios que en público, delante de mi equipo, me dicen que no era el tono y que esperan que mis datos estén bien. Y tenía varios mensajes de compañeros de otros medios de comunicación diciéndome: ‘Has hecho algo que es valiente en nuestra profesión, lo que has hecho tiene más importancia de lo que tú estás viendo en este momento”.

Feijóo acabó admitiendo su equivocación, pero tardó demasiado en hacerlo y eso tuvo sus consecuencias para Intxaurrondo. “Desde que él en la entrevista lanza ese dato que es erróneo hasta que reconoce, arrastrando un poco los pies, que la razón la tenía yo, en ese paréntesis de tiempo se desencadenan un montón de acontecimientos: una campaña de acoso a través de las redes sociales por tierra, mar y aire que sigue a día de hoy”, afirmaba la presentadora de La Hora de La 1.