No se habla de otra cosa y La Resistencia no podía dejar pasar la oportunidad de tratar el tema Pablo Motos de alguna manera. Este lunes decidió hacerlo con humor, que es lo que se les da bien, y sin nombrar en ningún momento al presentador de El Hormiguero. No hacía falta, quedó bastante claro que se referían a él.

Se encontraban hablando el conductor del programa, David Broncano, con el colaborador Pablo Ibarburu, cuando el cómico donostiarra soltó de repente una palabra aparentemente sin sentido. “Cómoda”, dijo, ante la perplejidad del presentador. “Por si me preguntas que qué ropa interior me gusta para dormir”, añadió Ibarburu. Se refería a la pregunta que Pablo Motos realizó a Elsa Pataky: “¿Tú cuando duermes usas ropa interior sexy o cómoda?”, cuestión que el Ministerio de Igualdad introdujo en el anuncio que tanta polémica ha generado y que provocó la airada respuesta de Pablo Motos, que negó ser machista.

El público de La Resistencia se dio cuenta rápidamente de a quién iba dirigido el dardo y estalló en carcajadas. Ibarburu continuaba ridiculizando a Motos: “No es una pregunta rara, se la hago a todo el mundo. Tengo diez millones de vídeos, ¿quieres ver esta tabla de excel? ¿Quieres saber lo que se ponen todos los famosos de España?”.

El guipuzcoano quiso lanzar una reflexión: no pasa nada por admitir un error y pedir disculpas. “Creo que ha llegado un punto en el que tenemos que aprender a pedir perdón también a veces. Porque somos muy flipaos. Estamos en el ‘¡eso fue hace ocho años!’, pero también puedes decir: ‘Vale, era un poco más tonto’. ¿Qué problema hay de vez en cuando si tú te equivocas con un chiste como cómico, no todos los días, en pedir perdón una vez?”.

Y también destacó que las mujeres siguen sufriendo un supuesto humor que encierra altas dosis de machismo. “Me he dado cuenta de que cuando tú eres mujer todo el rato son chistes de mierda, todo el día. Igual estás en la oficina y alguien te dice: ‘Eh, vete a la cocina y hazme la comida. Jaja, es broma, yo nunca diría eso’. Y tú tienes dos opciones como mujer: puedes hacerte la seria y quedar como la rancia de la oficina o reírte de la misma puta mierda de chiste que escuchas cada año hasta que te vas muriendo por dentro”.